La restauración de Barcelona se prepara para su reapertura. El próximo lunes, 23 de noviembre, comenzará el proceso de desescalada que anunció ayer el Govern de la Generalitat, y con él los diferentes sectores de la capital catalana reanudarán, poco a poco, su actividad.
Sobre la mesa hay dos propuestas. La de las federaciones y gremios de restauración de Cataluña, entre los que se encuentra el Gremi de Barcelona y que cuenta con el apoyo de la conselleria de Empresa, y la del Departament de Salut. Será el Procicat --compuesto por las conselleries de Salut e Interior-- quien deberá dar el visto bueno a lo largo de esta semana.
PROPUESTA DE SALUT
Salut propone una reapertura de bares y restaurantes al 30% de su aforo, tanto en terraza como en interior. El sector de la hostelería podrá abrir a partir de las 6:00 horas y deberá cerrar a las 17:00 horas, según el plan sugerido por la cartera que dirige Alba Vergés. Estas condiciones son las fijadas para el primer tramo de reapertura, que empezaría el lunes 23 de noviembre.
El segundo tramo de desescalada, que comenzaría el 7 de diciembre, dejaría reabrir bares y restaurantes al 50%, pero se mantendría el horario de cierre hasta las 17:00 horas. El tercer tramo de la desescalada, a partir del 21 de diciembre, los bares y restaurantes ya podrían abrir hasta las 21:00 horas con el 50% de su aforo.
En el cuarto y último tramo de la desescalada, que sería a partir del 4 de enero, no habría cambios para el sector de la hostelería.
PROPUESTA DE LOS GREMIOS
Las federaciones y gremios de restauración de Cataluña, entre los que se encuentra el Gremi de Barcelona, han elaborado su propio plan de desescalada en el que han concretado las condiciones de su reapertura. Estos, además, han cargado contra la propuesta del Govern y la Cambra de Comerç de Barcelona les ha apoyado.
El Director del Gremi de Restauració, Roger Pallarols, durante una entrevista a Metrópoli Abierta / V.M.
La propuesta fue presentada al conseller de Empresa, Ramón Tremosa. Las federaciones mantuvieron una reunión con el político y este se comprometió a apoyar y trasladar al ejecutivo catalán las ideas para su eventual aprobación en el Procicat, según ha adelantado La Vanguardia. El conseller presentará el plan de los restauradores este mismo martes, 17 de noviembre, durante la reunión del Consell Executiu, para que el Govern de la Generalitat lo estudie y tome una decisión esta misma semana.
El plan de la restauración cuenta con varias propuestas para su reactivación económica. Este ha fijado un calendario de reapertura que consta de tres fases con condiciones "mínimas", según los gremios, para que la actividad se pueda llevar a cabo y sea "viable" para salir del "cierre encubierto" que aseguran que les ha impuesto el Govern.
AFORO REDUCIDO
Durante la fase uno de desescalada de la restauración, que iría del 23 de diciembre al 8 de diciembre, los restauradores plantean abrir el interior de los establecimientos con un aforo máximo del 30%. Este podría ser ampliable al 50% en los locales en los que pueda haber 1,5 metros de separación entre mesas.
Bares y restaurantes deberían además garantizar la ventilación abriendo siempre puertas y ventanas exteriores. El consumo en espacios no ventilados quedaría prohibido. Las terrazas estarían también en funcionamiento y se debería tomar la temperatura a todos los clientes al llegar al local. A pesar de la reapertura, los locales deberán garantizar aspectos indispensables como la ventilación y la toma de temperatura a los clientes. Los establecimientos que no puedan garantizar una ventilación mínima tendrán prohibida su apertura. También incluyen la recomendación de llevar la mascarilla entre plato y plato, mesas de máximo seis personas, registro de clientes y el cierre del local a las 23.00 horas de la noche.
Un terraza en Barcelona, que podría reabrir a partir del 23 de noviembre / EUROPA PRESS
SEGUIMIENTO DEL PLAN
En cuanto a las otras dos fases, que tendrían lugar del 9 de diciembre al 6 de enero y del 7 de enero en adelante, las medidas se flexibilizarían y algunas se mantendrían.
Para poder hacer un seguimiento exhaustivo del plan de desescalada de la restauración, los gremios han propuesto crear una comisión de seguimiento junto a los departamentos de Interior, Salut y Empresa. Con esta comisión pretenden que el sector pueda volver cuanto antes a la actividad siguiendo las normas para prevenir contagios de Covid-19. El sector, uno de los más afectados por la crisis que ha desencadenado la pandemia, espera con ansia que el Procicat atienda alguna de sus propuestas y no se apruebe el plan elaborado por la conselleria de Salut.