El próximo 1 de mayo, el Día del Trabajador, los "anticolauistas" volverán a hacer una manifestación para exigir la dimisión de la alcaldesa de Barcelona. Tras el poder de convocatoria que tuvo la primera marcha, que el pasado 16 de abril reunió a 300 personas, sus impulsores han decidido repetir la manifestación con tal de aumentar la asistencia y volver a reivindicar el cese de Ada Colau.
Grupos cívicos y plataformas con una fuerte presencia en las redes sociales fueron los propulsores de la protesta. Además de la supuesta "degradación de Barcelona", los organizadores pretendían sentenciar la política municipal, la inseguridad, las políticas de movilidad de la administración, las "irregularidades" administrativas y el uso partidista del espacio público. También criticar la impunidad del colectivo okupa, las ayudas a entidades amigas del consistorio y el aumento de impuestos y tasas que ha tenido que afrontar la ciudadanía en los últimos años.
QUIEREN QUE SE CONVIERTA EN "UNA CONSTANTE"
Pau Amés, impulsor de la nueva manifestación y fundador de las páginas de Faceboook AntiColau y AntiColau, la destructora de Barcelona, con casi 12.900 miembros, ha explicado a Metrópoli Abierta que, desde el colectivo, pretenden que el movimiento "antiColau" se convierta en "una constante": "Nuestra intención es salir a la calle cada semana o cada dos. Esta mujer y su segunda están siendo imputadas, por ello su mandato tiene que terminar", dictamina el organizador.
En esta ocasión, el impulsor de la propuesta vaticina que la asistencia se multiplicará por dos –alrededor de unas 1.000 personas contando con que la organización contabilizó a 500 en la pasada convocatoria–. "Se doblará el número de asistentes. Aunque haya más manifestaciones el 1 de mayo, va a haber mucha concurrencia porque no se solapará con ninguna otra protesta", explican desde la organización.
El impulsor de la manifestación por la dimisión de la líder de los comunes ha confirmado a este medio que "ya se ha realizado el aviso y la solicitud al Ayuntamiento" y que, "la cancelen o no" se llevará a cabo igualmente porque están en "pleno derecho". A pesar de que el recorrido de la manifestación aún es secreto, la protesta terminará en la plaza de Sant Jaume, frente al consistorio, donde culminó la anterior marcha.
ACUSACIÓN DE ASESINATO
Pretenden que sea una protesta "pacífica". "No aceptamos la apología a ideologías. Es una manifestación contra el gobierno de Colau. Al resto no lo queremos", aseguran. "Vamos a estar muy alerta de que no se infiltre nadie. A la mínima echaremos y avisaremos a la policía", confirma Pau Amés.
En cuanto a las acusaciones de "asesinato" que se vertieron sobre la alcaldesa de Barcelona el pasado 16 de abril, el impulsor de la iniciativa "antiColau" ha explicado que "se hicieron por la indignación ante la muerte de una persona": "No tuvo el valor de pedir perdón", lamenta Amés en relación con la muerte de un motorista que impactó contra un bloque de hormigón en la calle de Balmes.
LLAMAMIENTO A SECTORES Y COLECTIVOS AFECTADOS
Xavi Moya, otro de los organizadores de la nueva manifestación, ha argumentado a Metrópoli Abierta que en esta ocasión se quiere hacer un llamamiento a los sectores de la restauración, del comercio, a los gimnasios y los autónomos, entre otros grupos damnificados por la gestión administrativa. Los promotores han contactado de forma coordinada con más colectivos afectados por las políticas de Colau, como los afectados por las restricciones de la ZBE, propietarios de bares y restaurantes a los que se les ha subido el IBI de las terrazas, etc.
“Queremos reivindicar que no estamos de acuerdo con el tipo de política, por llamar de alguna forma a lo que hace la señora Colau”, explica el reconocido exboxeador. En esta ocasión, animan a entidades comerciales y empresariales a que se unan a la protesta: "Vamos a intentar convocar a todos los sectores descontentos con las decisiones del Ayuntamiento y la Generalitat", explica.
El organizador asegura que el equipo de gobierno de Colau no está actuando de acuerdo con la situación económica que ha desencadenado la pandemia: "Tiene que dar más ayudas y hacer más caso a las personas que lo están pasando mal". Asevera que, "si no se producen reivindicaciones no se hará caso a la ciudadanía". “Se nos ha ninguneado y estamos hartos”, sentencia el campeón de Europa y del mundo de kung fu, full contact y kick boxing.
Protesta contra Colau, el viernes 16 de abril en Barcelona / V.M.
OTRA PETICIÓN DE DIMISIÓN
Esta no es la primera ocasión en la que se pide el cese de un alcalde de Barcelona. En el año 2010, tras el fracaso de la consulta de la reforma de la Diagonal propuesta por el gobierno de Jordi Hereu, el PDeCAT de Xavier Trias y el PP de Alberto Fernández Díaz reclamaron la salida del líder socialista, una dimisión que jamás llegó.