La eléctrica de Ada Colau es un fiasco. Barcelona Energia, nombre de la empresa, factura al Ayuntamiento de Barcelona y poco más. De la cifra total del negocio en 2020, 23,7 millones, 22,5 son de suministrar energía al propio Ayuntamiento. Así figura de en el Balance económico de Barcelona Energia 2018-2020, que se presentará este martes en comisión municipal a petición de Ciutadans.
El resto de la facturación de la eléctrica metropolitana, que se puso en marcha en verano de 2018, incluye 819.937,59 euros a particulares, 224.643,81 al grupo TERSA (participada por el propio Ayuntamiento y el Área Metropolitana de Barcelona-AMB) y 107.928,47 a empresas. Este abril, Barcelona Energia suministraba energía a 3.651 privados cuando el objetivo, cuando se puso en marcha, era llegar a los 20.000. Si a éstos se suman los servicios públicos, 4.680 (marzo de 2021), el número final de puntos de suministro eléctrico es de 8.331. En 2019, a Colau la votaron 156.157 barceloneses, es decir que su eléctrica no les convence ni a ellos.
Fuentes de Ciutadans subrayan que su formación es favorable a la existencia de una comercializadora pública de energía, "siempre que sea viable económicamente y que no le cueste dinero a los contribuyente", afirman desde el partido que lidera Mariluz Guilarte. "Pero viendo los números que nos presentan vemos que es todo lo contrario. Cuando cerca del 95% de los ingresos provienen del propio Ayuntamiento, la supuesta autonomía energética queda en entredicho. Prácticamente comercializa sus servicios a un cliente, que es el Ayuntamiento de Barcelona. Con los números de Barcelona Energia se demuestra que no es competitiva ni atractiva. Del total de la cifra de negocio de 2020, solo algo más del 3% proviene de clientes particulares, lo que revela el enorme fracaso que representa el proyecto".
OCTAVO PUESTO EN BARCELONA, SEGÚN LA CUOTA DE MERCADO
El informe elaborado por el propio Ayuntamiento hace cero autocrítica y presenta un balance y unas conclusiones muy optimistas a pesar de que el principal cliente -y casi único en importancia de facturación- de Barcelona Energia es el propio consistorio. Así, según la cuota de mercado, la eléctrica ocupa el octavo puesto en la capital catalana y el noveno en el conjunto de los municipios del AMB. Los datos son de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, el regulador del sistema energético español. A principios de año, este mismo organismo elaboró una comparativa con las mejores ofertas para los barceloneses y la eléctrica metropolitana de Colau no figuraba entre ellas.
La eléctrica de Colau ha cerrado 2020 con una facturación menor que 2019, 23.730.818,46 millones frente a 25.074.348,99, lo que se ha traducido en una caída del BAI (Beneficios Antes de los Impuestos) hasta 399.831,65 euros en diciembre de 2020. El informe deja otros datos de interés, como que Barcelona Energia ha gastado 504.933,87 en sueldos, 574.211,34 en imagen, 60.058,95 en asesores y consultores y 325.081,43 en impuestos. Por su parte, los gastos de explotación del mercado eléctrico ascienden a 21.537.103,34 millones, de los que 10.099.306,35 han sido para la compra de energía y 11.437.796,99 para peajes energéticos.
UNOS 84 EUROS DE AHORRO DE AL AÑO PARA UN CIUDADANO
El Ayuntamiento saca pecho de tener la tarifa variable "más transparente", con un precio que varía cada hora en función del mercado mayorista, y que es la tarifa "100% renovable más económica del mercado". Este precio, prosigue el informe, es el que escoge el 64% de los usuarios de la empresa. A nivel general, el área que encabeza el concejal de Emergencia Climatológica y Transición Ecológica Eloi Badia afirma que el ahorro de un ciudadano que se pasa a Barcelona Energia es de unos 84 euros al año. De suministrar energía al Ayuntamiento, durante dos años y medio, la hucha ha sido de 1,3 millones de euros.
Entre los servicios públicos a los que la eléctrica de Colau ofrece suministro eléctrico figuran a los cementerios de la ciudad, las estaciones del Bicing, el alumbrado, la vivienda pública y los mercados municipales, donde ERC ha detectado mejores ofertas para los paradistas que las que ofrece la eléctrica de Colau, mientras que el gobierno de Colau asegura que los 124 comerciantes que han cambiado de compañía se han ahorrado en conjunto 56.616 euros. Entre los últimos clientes que han contratado a Barcelona Energia figuran el MNAC y la red de Ecoenergies, esta última a partir de 2022.
LA CREACIÓN, APROBADA EN MARZO DE 2017
La creación de la eléctrica se aprobó en el pleno municipal del 31 de marzo de 2017, con el apoyo de todos los grupos municipales excepto el PP, que se abstuvo. Barcelona Energia, como se bautizó la iniciativa de los comunes, se puso en marcha a través de la empresa pública de tratamiento de residuos Tersa, participada por el Ayuntamiento de Barcelona (59%) y el Área Metropolitana de Barcelona (41%). El servicio a los ciudadanos del AMB se abrió en enero de 2019.