El ministro de Cultura, José Manuel Rodríguez Uribes ha marcado como prioritario construir una superbiblioteca pública en Barcelona.
Por primera vez en muchos años, se acaba de aprobar una licencia para el derribo de la llamada ‘ala de correos’ de la Estación de Francia y, por otra, se va a realizar en poco tiempo un encuentro de las tres administraciones implicadas –Estado, Generalitat y Ayuntamiento– para impulsar y redefinir el proyecto aprobado en el 2010.
PROYECTO
Las obras de la biblioteca se iniciaron hace 20 años, en el 2001, pero aparecieron restos arqueológicos de la ciudad que hicieron convertir el lugar en el actual Centre de Cultura i Memòria. Tras pensar en otras ubicaciones, se acordó levantar el edificio justo al lado de la Estación de Francia. En el 2012 se presentó la versión final del proyecto, que fue aprobado por el ministerio y que incluía una gran entrada, dos auditorios, sala de exposiciones, coworking y un espacio joven de más de 600 metros cuadrados de superficie.
SOLAR DIVIDIDO EN TRES PARTES
Según avanza La Vanguardia, la superbiblioteca se deberá levantar en un espacio que actualmente está dividido en tres partes: el aparcamiento a la izquierda de la Estación de Francia, el bloque popularmente conocido como el ‘ala de correos’ y el solar que se encuentra detrás. El proyecto estuvo parado durante seis años –entre 2012 y 2018–, cuando se volvió a tramitar la licencia de derribo porque la anterior había caducado.
DERRIBO
Los terrenos los cede el consistorio de la ciudad, el edificio es propiedad del ministerio –que paga las obras presupuestadas en 32 millones de euros más IVA– y la gestión de la futura biblioteca corresponde a la Generalitat. El derribo del bloque actual cuesta un millón de euros, que ya constan en los presupuestos generales del Estado de este año.
Barcelona es una de las pocas ciudades de España que no cuenta con una biblioteca del Estado. La de Girona, llamada Carles Rahola, fue de las últimas en inaugurarse hace 17 años.