Parcs i Jardins continúa en una profunda crisis laboral. Su presidente, Eloi Badia, ya estuvo en el foco de las críticas tras el reciente caso de acoso que resolvió como si nada hubiera pasado. Pero el problema endémico es la falta de trabajadores.
Los empleados no han dejado de exigir la necesaria ampliación de la plantilla durante los últimos años, unas peticiones que no han obtenido respuesta. Mientras tanto, los planes de Ada Colau y su gobierno municipal pasan por una naturalización de Barcelona y la insistencia en las superillas, unos objetivos para los que es imprescindible el incremento de trabajadores de Parcs i Jardins.
REPOSICIONES
La deseada ampliación de plantilla sigue sin llegar y, en su defecto, desde el Ayuntamiento se ha dado luz verde a algunas reposiciones. La última se aprobó la pasada semana, y está destinada a reponer trabajadores que causaron baja durante los tres últimos años.
En total, la convocatoria del Institut Municipal de Parcs i Jardins comprende 76 plazas correspondientes a la categoría de "auxiliar del verde" y otros servicios auxiliares.
Esta aprobación llega dos meses después de que el consistorio diera luz verde a la adquisición de vegetación para la capital catalana, en la que se realizó una inversión superior a los tres millones de euros.
Trabajadores de Parcs i Jardins / AJ BCN
LAS SUPERILLAS REQUIEREN PERSONAL
Desde la sección sindical de Parcs i Jardins de CCOO, lamentan la actual situación en cifras de personal. Fuentes sindicales apuntan al grave perjuicio que supone la falta de trabajadores, y recuerdan que "la edad media de la plantilla supera los 50 años".
Las mismas fuentes señalan que poder reponer a empleados para sustituir a jubilados o a aquellos que marcharon de la empresa "ya representa un avance para frenar la bajada de personal". Pese a ello, aseguran que es del todo "insuficiente" para corregir el problema actual.
Respecto a la cifra de personal necesaria para la compañía, subrayan que se requieren "unas 400 personas tirando al alza", y que la incorporación de "menos de 200 personas no se notaría". Además, destacan la importancia de ampliar la plantilla si el gobierno municipal quiere tirar adelante sus planes de naturalización, incorporación de "zonas verdes" y creación de "superillas", que "requerirá personal si se quieren hacer".
DEMASIADOS JEFES
Fani Portolés, delegada de CGT en Parcs i Jardins, se pronunció en el mismo sentido sobre la falta de trabajadores en declaraciones para Metrópoli. La sindicalista insistió en la incorporación de "400 trabajadores" y lamentó que las tasas de reposiciones fueran pocas y comprendieran a un número escaso de empleados.
La portavoz remarcó que los nuevos trabajadores debían llegar a pie de calle, como "jardineros", ya que actualmente cuentan con "muchos jefes" que ocupan "cargos intermedios", lo que no hace ningún favor a las necesidades de producción.
Portolés también estuvo en primera línea durante la manifestación del pasado mes de febrero en la plaza Sant Jaume, donde trabajadores de Parcs i Jardins pidieron la dimisión de Badia por su gestión tras los recientes casos de acoso sufridos por dos empleadas.