El sistema de recogida de basuras puerta a puerta ha tenido un estreno muy polémico en Sant Andreu de Palomar. Los principales problemas detectados han sido la falta de diálogo con las entidades y la acumulación de bolsas en las calles. Además, los vecinos denuncian la “imposición” de la medida y la “intromisión en su vida privada” a través del chip de las bolsas de reciclaje.
El pasado 2 de junio centenares de vecinos irrumpieron en el consejo de barrio para expresar su malestar. Ante la falta de actuación del Ayuntamiento tras recibir sus quejas y demandas, los afectados ya han organizado otra propuesta para el próximo jueves, 10 de junio.
El barrio, que siempre ha sido como un “pequeño pueblo” para sus habitantes, ha sido el segundo de Barcelona en implementar el puerta a puerta y muchos de los vecinos consideran que “no están preparados” para ello.
Metrópoli ha recorrido las calles de Sant Andreu durante la salida de las basuras para preguntar de primera mano el trasfondo del malestar entre los residentes.