Las basuras de Sant Andreu de Palomar huelen mal y salpican a Ada Colau y Eloi Badia, concejal de Emergencia Climática y Transición Ecológica. El nuevo sistema de recogida puerta a puerta, implementado ya en muchas ciudades, ha tenido un estreno muy movido. La falta de diálogo con las entidades del barrio y algunos desajustes explican el malestar de muchos vecinos, que se quejan de problemas de salubridad por la acumulación de bolsas en las calles y denuncian que se sienten espiados con el chip que se las ha impuesto. Los servicios municipales solo se llevan las bolsas que cumplen con los requisitos y los vecinos preparan nuevas protestas contra el gobierno municipal.
El malestar de los vecinos de Sant Andreu preocupa a Colau y los comunes, sobre todo por tratarse de un distrito en el que la candidatura de la alcaldesa fue la más votada en mayo de 2019. “Todos los cambios cuestan de aceptar”, sostienen en Barcelona en Comú. En Sant Andreu, mientras, muchos ciudadanos critican “un nuevo caso de dogmatismo” de Colau, satisfecha con los cambios introducidos y la respuesta de los ciudadanos del barrio.
Basura acumulada en un espacio de Sant Andreu / PABLO MIRANZO
CONSEJO DE BARRIO MOVIDO
El pasado 2 de junio, centenares de vecinos irrumpieron en el consejo de barrio de Sant Andreu para expresar su malestar, exigiendo la dimisión de Lucía Martín, consejera del distrito y miembro destacado de BComú. “Es posible que los cambios cuesten, pero si son impuestos, todavía más. Las franjas horarias estipuladas no se ajustan al día a día de muchos vecinos, obligados a almacenar basura en casa. Las casas y las calles apestan”, responde Miquel, un vecino, preocupado por la posibilidad de ser sancionado y, sobre todo, por la basura que queda esparcida en el suelo. En Telegram, mientras, unas 500 personas comparten su indignación en un grupo de reciente creación.
Numerosos vecinos acceden al consejo de barrio de Sant Andreu para protestar
Cristina Galán, presidenta de la Associació de Veïns de Sant Andreu Sud, es una de las voces más críticas: “Hay mucho rechazo vecinal en Sant Andreu porque se trata de una imposición. Quieren quitar los coches y los obstáculos de la calle, pero las llenan con bolsas de basura”.
LOS PROBLEMAS DEL SISTEMA
Galán critica los horarios para depositar las distintas bolsas de basura en la calle. Asegura que cuesta compaginarlos con la vida laboral y recalca que no se han tenido en cuenta las necesidades de cada familia. Ni el número de personas que conviven en cada vivienda. “Y tampoco se ha pensado en las personas invidentes o con movilidad reducida. En Sant Andreu hay muchas calles con aceras estrechas. Este sistema es otra imposición ideológica de Colau sin tener en cuenta la densidad ni las necesidades de la población”, añade la presidente de la Associació de Veïns de Sant Andreu Sud.
Decenas de bolsas de basura depositadas junto a contenedores en una calle de Sant Andreu / CEDIDA
En conversación con Metrópoli, Galán remarca que el sistema puerta a puerta se aplica “mucho mejor” en otras ciudades europeas. En cambio, ha fracasado en Vilassar de Mar. En el caso de Sant Andreu, asegura, su implementación ha sido nefasta y concluye: “Ha sido una imposición ideológica de marketing para justificar los fondos europeos que se reciben por asuntos de Transición Ecológica”.
EL RECICLAJE
Santi Serra, presidente de la Associació de Veïns de Sant Andreu de Palomar, discrepa de Galán. “El rechazo al nuevo sistema llega de gente que no es de Sant Andreu. El 73% de los vecinos hace correctamente el reciclaje”, argumenta. Serra, muy próximo ideológicamente a los postulados de Colau, remarca que el nuevo sistema “es una imposición de Europa porque nos estamos cargando el planeta”. Y sentencia: “El Ayuntamiento nos informó del modelo actual a finales de 2020. El problema es que los partidos ya están en campaña electoral. Sí he de reconocer un error diré que los horarios no se han implementado bien. Y menos ahora, con vistas al verano”.
Manuel Múñoz, el presidente de la Associació de Veïns de Sant Andreu Nord-Tramuntana, niega que desde el consistorio se les informara de los cambios que introducirían en el sistema de recogida de basuras. “Es falso. Informaron a sus entidades afines. La Federació de Associacions de Veïns i Veïnes de Barcleona (FAVB) no ha informado de ningún cambio. Y el Ayuntamiento de Barcelona solo habló con Santi Serra, que manipula la realidad y nos gira la cara cuando nos ve en la calle”, añade.
CRÍTICO CON LAS FORMAS
Esta asociación puntualiza que no está contra la medida, sino contra las formas y “contra la desinformación previa”. “Por eso hay una desconfianza total en Sant Andreu. La gente mayor tiene muchos problemas con el nuevo sistema, que debía haberse hecho de manera gradual. No votamos a Colau para ser sus súbditos, sino ciudadanos”, apunta Muñoz. Este dirigente vecinal no solo votaba a los comunes; estaba muy implicado en sus campañas, pero ahora se siente "engañado" por la alcaldesa.
Bolsas y cubos de basura en una calle de Sant Andreu / CEDIDA
Los partidos de la oposición se muestran muy críticos con la gestión de Colau. También su socio de gobierno, el PSC, que ha denunciado “falta de diálogo” de los comunes, que solo informaron a entidades afines como la FAVB. “La mejor idea aplicada desde el despotismo ilustrado no funciona”, sostienen los socialistas.
LA OPOSICIÓN, MOLESTA
“Las mejoras del sistema de recogida de basuras no se puede hacer en contra de los vecinos y vecinas”, comenta Neus Munté, de Junts per Catalunya. “No se puede implementar este sistema sin tener en cuenta las dificultades que suscita a muchos vecinos. Por dicho motivo pedimos un espacio de diálogo con vecinos, comerciantes y entidades”, añade.
Óscar Ramírez, concejal del PP, pide cambios inmediatos. “En la fase inicial se han detectado múltiples incidencias en el servicio, un aumento de la suciedad de las calles y la acumulación de las bolsas no recogidas por el sistema de limpieza al no cumplir la normativa”. Y añade: “El gobierno municipal debería revisar el modelo implementado y desplegarlo de forma progresiva. Al mismo tiempo, denunciamos las imágenes indignantes de ancianos haciendo cola con bolsas de pañales, esperando al servicio de recogida que no llegó a la hora en el punto establecido”.
MÁS CRÍTICAS
Luz Guilarte, la líder de Ciutadans en el Ayuntamiento de Barcelona, pide al gobierno de Colau que “incentive el reciclaje en lugar de sancionar”. “Pediremos que se retire este sistema de recogida de basuras porque no está dando buenos resultados. Sant Andreu está lleno de suciedad, con muchos restos y bolsas abiertas por la mañana que fomentan la aparición de plagas”, agrega Guilarte.
Centenares de vecinos protestan en Sant Andreu contra el nuevo sistema de recogida de basuras / TWITTER MENA GADEA
En ERC, Max Zañartu también critica las formas utilizadas por el gobierno de Colau y Collboni. “Reciclar bien no es fácil para todo el mundo. No se ha valorado el factor de la oportunidad, a las puertas de verano, antes de las vacaciones y en plena desescalada”. Eva Parera, de Barcelona pel Canvi, califica de “muy intrusivo” el nuevo sistema “porque afecta a la privacidad de las personas”.
PRÓXIMA MOVILIZACIÓN
El debate sobre el nuevo sistema de recogida de basuras sube de tono día tras día. Este jueves, 10 de junio, los vecinos del barrio expresarán su malestar a la audiencia pública tras pedir la dimisión de la regidora Lucía Martín en el último consejo de barrio.
El acto municipal está previsto para las 18.30 horas. Los convocantes hacen un llamamiento para que las personas que no tengan espacio en el interior de la sede del distrito lleven un silla para concentrarse en la plaza de la Orfila. "Estàs en desacord amb el Porta a porta?, Cansat d'imposicions no consensuades? Visibilitza el teu rebuig", dice la publicidad de la protesta.