El Reino Unido no situará a Barcelona en la lista roja de riesgo de coronavirus
Permanecerá en ámbar, lo que permitirá a los que tienen la pauta completa de vacunación evitar la cuarentena
4 agosto, 2021 11:42Noticias relacionadas
El Reino Unido no colocará a España en su lista roja de países con alto riesgo de covid-19, por la caída de los casos y la preocupación por la falta de habitaciones de hotel suficientes para mantener en cuarentena a los turistas británicos que den positivo, según revela este miércoles el diario The Times.
El Gobierno británico tiene previsto actualizar este jueves su lista sobre viajes internacionales, en la que cataloga a los países en verde, ámbar o rojo, en virtud del riesgo de covid.
VARIANTE BETA
España está en ámbar –riesgo intermedio–, pero en las últimas semanas se especuló en el Reino Unido con la posibilidad de que pasase a rojo por el fuerte aumento de los contagios y la posible propagación de la variante Beta, identificada por primera vez en Sudáfrica y aparentemente más resistente a las vacunas. Sin embargo, la variante Beta supone actualmente solo el 0,5% de los casos de covid en España, dice el diario británico.
Los ciudadanos que entren en territorio británico procedentes de un país catalogado en rojo están obligados a hacer una cuarentena de 10 días en un hotel asignado por el Gobierno, además de hacerse cargo del gasto del alojamiento y la comida.
TEST DE COVID-19
Según avanza The Times, el Gobierno comunicará mañana que España permanecerá en ámbar, lo que permitirá a los que tienen la pauta completa de vacunación evitar la cuarentena al regresar a Inglaterra, pero sí deberán hacerla los que no están inmunizados. Además, todos los pasajeros –los vacunados y los que no– deben someterse a un test de covid al segundo día de entrar en el Reino Unido, en tanto que los no inmunizados están obligados a hacerse un test adicional al octavo día.
Al parecer, los funcionarios querían situar a España en una nueva categoría -lista ámbar de vigilancia-, que advertiría a los viajeros de que el país podía pasar a rojo en cualquier momento, pero el primer ministro británico, Boris Johnson, decidió abandonar ese plan porque supondría un grave trastorno en plenas vacaciones estivales.