El grupo municipal de Ciutadans ha pedido al gobierno de Ada Colau que tramite la bonificación de la tasa de terrazas de 2022 al margen del resto de Ordenanzas fiscales. Según la presidenta del grupo municipal, Mariluz Guilarte, todos los partidos de la oposición están de acuerdo en que la rebaja del 75% para el sector de restauración se siga aplicando.
Detrás de las intenciones del partido naranja está evitar que ERC pueda salir ante la opinión pública como la formación que ha conseguido la reducción. En el partido naranja dan por hecho que los republicanos se abstendrán en la aprobación de los presupuestos de 2022, para que las cuentas municipales salgan adelante, a cambio de prevendas políticas.
"MONEDA DE CAMBIO"
Según Guilarte, existe un consenso unánime para la reducción de la tasa, pero opina que el ejecutivo local quiere "hacer rehén de la negociación [de las Ordenanzas fiscales] a los 80.000 trabajadores del sector. Para la presidenta del partido naranja, Colau y Jaume Collboni quieren utilizar al sector de la restauración "como moneda de cambio", y acusa a comunes y a socialistas de querer "romper el consenso y buscar la confrontación".
Según la previsión presupuestaria para el 2022, el Ayuntamiento estima unos ingresos de 10,7 millones por la tasa de terrazas. Actualmente, la aprobación inicial de los impuestos y tasas para el próximo año prevé el cobro del 100 por 100 de la tasa.