La Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH), el Sindicat de Llogateres, el Sindicat d’Habitatge de Gràcia y diversas entidades del Moviment per l’Habitatge se preparan para una Navidad "movida": se esperan varios desahucios en los próximos días y estas entidades no quieren que nadie sea desalojado de su vivienda en estas fechas tan señaladas. Las tres entidades principales han formado una suerte de plataforma a la que han puesto el apelativo de Comitiva Antidesahucios.
Las entidades citadas realizaron este jueves una "cumbre" para diseñar la estrategia de movilizaciones a seguir ante los desahucios. En una comunicación a sus activistas, el Sindicat de Llogateres señalaba este miércoles: “Os escribimos una vez más para pediros apoyo durante los próximos días y así hacer frente al alud de desalojos que se nos vienen encima en las vísperas de las fiestas navideñas. El próximo lunes 20 de diciembre, cuatro familias están en riesgo de perder sus hogares en el barrio de Gràcia y de la Dreta de l’Eixample”.
UN TRISTE ANIVERSARIO
La misiva recuerda que “hace dos años, fuimos testigos de cómo un 20 de diciembre la familia de Juan y Livia también era desahuciada de casa por no querer asumir una subida de alquiler abusiva. Exactamente dos años más tarde, en plena pandemia, y en plena moratoria de desalojos, seremos testigos del intento de expulsión de cuatro familias más”. La historia, pues, se repite, pero esta vez multiplicado por cuatro, ya que ese día están planificados sólo en la capital catalana cuatro desalojos. Una realidad demoledora para un triste aniversario.
De hecho, el pasado martes ya comenzó una semana infernal con el intento de desalojo de dos familias. Uno de ellos, programado por la multinacional Blackstone, planeaba el desahucio de una mujer y sus dos hijas en la calle Bernat Metge, del Besòs. El otro debía de tener lugar en la calle Felip II, en la Sagrera. En este caso, hubo un fallo en la administración y por los problemas en la tramitación de la renta garantizada, el inquilino dejó de percibir esa prestación y no podía hacer frente al alquiler. Las movilizaciones de las plataformas vecinales lograron parar los desalojos en ambos casos.
El miércoles también estaba programado otro desalojo en la calle Móra la Nova, en los Tres Turons. Y el jueves estaba previsto otro en la calle Mina de la Ciutat, en Roquetes, donde se iba a la calle una familia que tiene a su cargo una menor. Para este viernes, la cosa ya estaba más complicada: sólo en la calle Portal Nou están anotados tres desahucios. Un gran cartel del Sindicat d’Habitatge del Casc Antic que cruza la calle así lo recuerda. En ese punto se han dado cita durante toda la mañana diversas entidades, que organizan un desayuno popular, actos deportivos, un concierto, un acto político, un vermut y música hasta que la comitiva judicial se vaya. El Sindicat d’Habitatge del Raval también tocó a rebato para concentrarse con el fin de evitar el desalojo de Alexandra y su familia en la calle Espalter. Esa misma entidad ya impidió otro desalojo el pasado lunes en la calle Ramelleres.
EL DÍA GRANDE
Pero el día grande es el próximo lunes día 20, para el cual ya está convocada una “jornada de lucha masiva”. Así, se realizarán llamamientos a los activistas y a las entidades sociales para realizar concentraciones en distintos lugares. “Hemos decidido pasar a la acción”, dicen los organizadores. A través de sus plataformas, ya han convocado en la calle Roger de Flor para este lunes en lo que consideran “el último desahucio del 2021”, que afecta a Carles y su madre, que llevan 25 años en la misma vivienda y mantienen un pleito con la propiedad desde el 2017. Será un intento más de desalojo después de que el del pasado día 3 se hubiese paralizado el que había programado para esa jornada.
La comunicación citada señala que “nos organizaremos en las calles para parar los desahucios desde primera hora de la mañana”. Las entidades antidesahucios están dispuestas a todo. “El Govern que haga honor a sus pactos: no enviéis antidisturbios el lunes, porque os encontraréis con el movimiento por la vivienda de cara. Y sed valientes: tenéis que aprobar una ley que prohíba las expulsiones y obligue a los arrendadores a renovar los contratos una vez se acaben”, lanzaron las plataformas por Twitter. El Sindicat d’Habitatge de Gràcia apeló directamente al president: “¿Qué harás, Pere Aragonès? ¿Nos enviarás a la Brimo para desahuciar a Carlos y su madre? ¿O harás algo para evitar el último desahucio del 2021?”. En una comparecencia este jueves, los portavoces de la Comitiva Antidesahucios avisaron también a la Generalitat de que “no envíe la Brimo y que ponga en marcha las medidas para dar una salida habitacional a Carles, como nos han prometido en el último desalojo”.
Los activistas reclaman también a la Generalitat que no facilite la aprobación de los presupuestos generales del Estado “si el Gobierno central no acepta una ley de vivienda que impida esta masacre de desahucios y garantice el derecho a la vivienda”. Y avisan: si la Administración no responde y no legisla para obligar a estabilizar los alquileres (“que impida subidas del 30%”, subrayan), “tendremos que seguir en las calles actuando”. Ras i curt.