Vecinos y comerciantes del barrio de Sant Antoni protestarán este jueves por la tarde para que el Ayuntamiento de Barcelona quite la losa de hormigón de la ronda de Sant Antoni. El emplazamiento acoge desde hace unos años en el lugar en el que se instala el mercado de la miseria y en los últimos meses se ha convertido en un foco de conflictos, incivismo y delitos.
Unidos baja la Plataforma d'Afectats per la Llosa de Sant Antoni, vecinos y comerciantes han elaborado un vídeo promocional de la manifestación en el que se ven imágenes del estado de dejadez de la ronda. La plataforma reclama al Ayuntamiento un barrio "seguro y digno" y que reabra la calle al tráfico hasta que repiensa el proyecto de reforma.
CORTE EN COMTE D'URGELL CON MANSO
La intención de los vecinos y comerciantes es cortar la calle Comte d'Urgell con Manso a las 19.00 horas. La manifestación tendrá lugar un día antes del pleno municipal, en el que muy probablemente se tratará la cuestión. Los distintos partidos de la oposición -ERC, Valents, JuntxCat, PP y Ciutadans- ya se han manifestado a favor de las peticiones de la plataforma.
Fuentes de la plataforma apuntan que se ven obligados a cortar la calle porque el Ayuntamento no se plantea sacar la losa hasta que haya un proyecto de reforma para todas las rondas de Ciutat Vella, no solo la de Sant Antoni, sino también para las de la Universitat o Sant Pau.
MÁS PROBLEMAS EN EL RAVAL POR LA PRESENCIA DE LA URBANA
Para vecinos y comerciantes, que conviven cada día con el problema del incivismo y que ahora se está trasladando a las calles colindantes del Raval por la presencia permanente de la Guardia Urbana, es un calendario demasiado largo. Calculan que de aceptar la propuesta municipal convivirán con la losa entre cuatro y siete años más.
El Ayuntamiento de Barcelona ya tenía un proyecto de reforma para la ronda de Sant Antoni que presentó en 2017 y que debía a empezar a ejecutarse un año después. Sin embargo, la licitación se anuló. La losa de la ronda se colocó para albergar las carpas provisionales de los comerciantes del histórico mercado del barrio mientras éste se rehabilitaba. Fue hace más de una década. Y ahí sigue.