Una popular 'dj' ucraniana se refugia en Gràcia: "En una mañana mi vida se destruyó"
Alina Havryliuk abandonó el país en guerra junto a su madre y su mesa de mezclas
12 marzo, 2022 13:55Noticias relacionadas
La dj Alina Havryliuk, conocida Alevtina, se refugia en el barrio de la Vila de Gràcia Barcelona después de un largo viaje en el que solo trajo una maleta sin apenas ropa porque todo el espacio lo ha dejado a su mesa de mezclas. Las fotos colgadas en su cuenta de Instagram, que siguen 50.000 personas de todo el mundo, dan fe de como la joven ha pasado, de la noche a la mañana, de una vida de lujosas fiestas en azoteas por todo el mundo, a la angustia de una guerra que la ha obligado a una salida forzosa del país.
"Tenía una vida increíble y un buen trabajo. En una mañana toda mi vida se destruyó", explica a Efe desde un piso alquilado en el que por ahora vive con su madre y en el que pronto espera poder alojar también a su mejor amiga y su hijo, que todavía están de camino.
La noche anterior a la invasión, Alina y sus amigos habían grabado un programa de Kiss FM Ucrania para colgarlo en su canal de Youtube y charlaban bebiendo gin tonics haciendo cábalas sobre que harían si realmente se daba esa guerra de la que hablaban algunos medios internacionales, cuenta. "Realmente no esperábamos esto", cuenta la joven, quien apunta que su madre había comentado días antes: "Es imposible que Putin bombardee Kiev".
"SOY MUY AFORTUNADA"
"Se que soy muy afortunada, muchos de mis amigos están tomando partido en la guerra y yo estoy aquí a salvo", reconoce la DJ, quien dice sentir "culpa" por salir del país y estar a salvo, circunstancia que sin embargo por ahora no le facilita volver a descansar por la noche. "No puedo dormir. Intento tomarme valerianas pero no puedo. Sé que pasará, supongo, con el tiempo. Pero es que mi cerebro está inquieto y me despierto todo el rato y me asusto ante el mínimo ruido", explica.
En el cuarto día de guerra, decidió marcharse junto a su madre y unos amigos hacia Polonia, un viaje en coche que les llevó a vivir el bombardeo a escasos metros de uno de los puentes de la ciudad. "Estábamos temblando, todo era como en las películas", narra. "¿Por qué vine a Barcelona? Lo elegí por un tema profesional. Tengo que seguir trabajando porque tengo una familia y yo les sustento. Mis padres se han quedado sin trabajo, ella vendía ropa interior y mi padre era obrero de la construcción", afirma.
SU MESA DE MEZCLAS, SU BIEN MÁS PRECIADO
Su mesa de mezclas, su bien más preciado, con el que toca sus temas de tecno house, y su principal herramienta de trabajo, está ahora en la encimera de la cocina de su nueva casa de Barcelona, un lugar donde cuenta que alguna vez había pensado en convertir en nueva residencia aunque nunca pudo pensar que fuera de esta manera.
Explica que está esperando al 15 de marzo, cuando espera se aclaren los procedimientos para solicitar el permiso de trabajo y residencia, sin los que no puede ser contratada ni alquilar un piso a su nombre. Mientras, ha contactado con una organización que ayuda a refugiados que están en peor situación que ella porque "necesita" ayudar.
SU SUEÑO, TRABAJAR EN IBIZA
Alina no entiende por qué los medios rusos llaman "nazis" a los ucranianos y que Putin diga que les "quieren salvar". "No necesitamos esos salvadores", aclara. Ella misma tiene amigos rusos que le advierten de no hablar demasiado sobre lo que ocurre en sus redes "por si Ucrania pasa a ser Rusia" le puede causar "problemas". "Pero yo no me voy a callar, no voy a dejar de poner mensajes sobre lo que pasa", dice convencida.
Alina no sabe cuánto tiempo estará en Barcelona, ni si podrá cumplir con su expectativa de trabajar este verano en Ibiza para ayudar a su familia, pero calcula que, como mínimo, en un año no podrá regresar a Ucrania. "Pase lo que pase yo estaré siempre del lado de mi país, de Ucrania. Estuve allí, sé lo que vi", dice emocionada.