En los años 80, el Ayuntamiento de Barcelona puso en marcha un famosa campaña publicitaria que está en la cabeza de miles de ciudadanos, la de Barcelona posa't guapa. La iniciativa municipal, lanzada por el gobierno de Pasqual Maragall, invitaba a los barceloneses a adornar ventanas y balcones y puso en marcha un programa de protección y mejora del paisaje urbano dirigido a fomentar la rehabilitación de edificios y otros elementos arquitectónicos de la ciudad.
Ahora, una plataforma ha copiado el nombre de la popular campaña barcelonesa y se ha bautizado con él. Así se puede comprobar en su página web [ver aquí]. El impulsor, Carlos Portales, asegura que detrás de la iniciativa no hay ninguna mala intención y que se haya optado por esta denominación es un "homenaje" a aquella época, una Barcelona en la que no había divisiones, y que busca realzar la labor que hizo la administración de entonces.
UNA "FRASE QUE RESULTÓ CAUTIVADORA"
En su manifiesto fundacional, la plataforma reconoce que hace uso de "una antigua frase que resultó cautivadora, Barcelona, posa´t guapa". "Este eslogan supuso un grito de unión de todos los barceloneses en la tarea de lavar la cara en nuestra ciudad para recibir orgullosamente la Olimpiada de 1992. Ahora queremos que este mismo eslogan sea un grito que suene mejor, como aquel otro de ¡Barcelona Vía Fuera!, que en la Edad Media se lanzaba al aire, con las campanas de las iglesias, para convocar a los ciudadanos a defender su ciudad de asaltantes y ladrones", añade.
Portales reconoce que el nacimiento de la plataforma es muy reciente y asegura que no se trata de una asociación constitucionalista, como indican algunas voces municipales, sino "cívica". En el texto fundacional, destaca que la población de Barcelona, en la última década "ha sabido mantenerse tranquila y serena ante los muchos desastres y abusos que ha sufrido por parte de políticos interesados y por parte de bárbaros desaprensivos que han interpretado este buen hacer de la ciudadanía, como si se tratara de cobardía. Pero ahora la insolencia y el mal gobierno municipal ha hecho derramar el vaso. Los propietarios de la ciudad, es decir, los que vivimos en Barcelona, hemos decidido poner fin a esta situación de atropello".
"DERIVA POPULISTA"
Según la plataforma, Barcelona "merece recuperar la pujanza, la fuerza y el liderazgo de aquellos años en que era destino deseado para visitantes y abrigo acogedor para sus habitantes", y considera que con la actual "deriva populista, la administración de la ciudad está perdiendo las oportunidades de un auténtico progreso social y económico y de sostenibilidad". "Nuestras autoridades municipales no pueden permanecer ajenas en la demanda de la población que exige que Barcelona recupere su dinamismo de antes y que suponía la seguridad de construir un futuro estable y económicamente solvente para todos sus habitantes", añade.
USO "OPORTUNISTA Y NAÍF"
Metrópoli se ha puesto en contacto con uno de los creadores de aquella famosa campaña municipal. Las fuentes consultadas dicen que se trata de un uso del Barcelona, posa't guapa "naíf y oportunista". Reconocen que lo único que se ha copiado es el eslogan y no el logo, del que el Ayuntamiento hizo diversos porque el Posa't guapa estuvo en uso, en distintos momentos, hasta bien entrados los años 2000.
Sobre la posibilidad de que la copia se pueda denunciar, las fuentes que participaron en la creación de la campaña lo ven difícil porque cuando se registra una campaña se incluyen distintos elementos: una imagen, un logo, el tipo de letra... Además, consideran que como detrás del uso de la plataforma no se busca una ganancia comercial es complicado que cualquier reclamación pueda prosperar. Portales asegura que los eslóganes no se pueden registrar y que hizo todas las comprobaciones antes de usar el nombre de Barcelona, posa't guapa.
UNA INVERSIÓN PÚBLICA DE UNOS 100 MILLONES DE EUROS
Entre el 11 de diciembre de 1985, cuando se uso por primera vez el eslogan Barcelona, posa't guapa, hasta 2010, la campaña municipal permitió la rehabilitación de unos 27.000 edificios de la ciudad. Según explicó el entonces al alcalde Jordi Hereu, la inversión pública fue de unos 100 millones de euros, que sirvieron para financiar intervenciones por valor de 700 millones de euros.
Al cierre de este artículo, el gobierno de Ada Colau y Jaume Collboni no se había pronunciado sobre el uso del histórico eslogan municipal por parte de una plataforma. Fuentes de la oposición sí consideran que se hace un uso de la marca Barcelona para fines "políticos".