El nuevo túnel de Glòries vuelve a provocar grandes retenciones de coches en la entrada de Barcelona. Esta mañana el acceso a la ciudad ha registrado una larga cola de vehículos que se movían a paso de tortuga por la infraestructura de Gran Via. Así lo muestra un vídeo grabado por Metrópoli esta mañana desde un autobús.
Los dos carriles de circulación para el vehículo privado concentraban decenas de coches parados o en una marcha muy lenta. El túnel, inaugurado el pasado 3 de abril, ha provocado en numerosas jornadas con grandes congestiones que han complicado el tráfico en una de las principales entradas a la ciudad.
Este jueves, el mapa sobre el estado del tráfico en tiempo real que ofrece el Servei Català de Trànsit de la Generalitat muestra con claridad la congestión del túnel. Casi la totalidad de la infraestructura, de cerca de un kilómetro de longitud, están subrayados en rojo. A las 09.00 horas, media docena de tramos en otros puntos de la ciudad estaban en rojo: en la Diagonal, travesera de Dalt y otras calles del Eixample.
EL AYUNTAMIENTO DEFIENDE EL TÚNEL
Uno de los últimos días en los que hasta ahora se habían registrado colas fue el pasado 21 de abril. La construcción del túnel ha permitido un espacio más amable para el peatón en la plaza de Glòries, vacío de coches desde que el túnel entró en funcionamiento.
Desde la aparición de las primeras retenciones, el Ayuntamiento de Barcelona no ha cambiado su postura. Defiende el supuesto buen funcionamiento de esta infraestructura y que en este punto siempre se han registrado colas de coches.
ABIERTO EL 2 DE ABRIL
El túnel de Glòries en sentido Llobregat abrió al tráfico el pasado 2 de abril tras siete largos años de obras. Ya el primer día laborable, el 3 de abril, el colapso en Glòries fue monumental. En días posteriores, las retenciones se trasladaron a otras calles y a las rondas, ya que los conductores buscaban otras rutas para acceder a la ciudad. Hasta la regidora de Valents, Eva Parera, decidió un día probar el nuevo túnel en hora punta y se encontró con un colapso monumental.
En opinión del RACC, hay mucho margen de mejora para ganar fluidez en el túnel de Glòries. El club automovilístico considera que el Ayuntamiento tiene que tomar nota que la gente sigue usando el vehículo privado y que el transporte público existente no responde a las necesidades de la población.