El sindicato CSIF de la Guardia Urbana ha demandado al teniente de alcalde de Seguridad, Albert Batlle, por "vulnerar el derecho al honor, intimidad personal y familiar" de la Central Sindical Independiente de Funcionarios. La organización de trabajadores acusa al máximo responsable político del cuerpo policial de "menoscabar la honorabilidad" y la "imagen" del sindicato por referirse a Eugenio Zambrano, portavoz del sindicato, como una persona próxima a la extrema derecha.
El motivo del encontronazo entre CSIF y Batlle se originó tras los altercados del 25 de septiembre de 2021 en el macrobotellón de plaza Espanya durante las fiestas de la Mercè. Al día siguiente, el 26 de septiembre, Zambrano atribuyó en un medio de comunicación la violencia generada en la avenida Maria Cristina a "delincuentes, personas antisistema, Mena" y a personas "que cualquier excusa les va a venir bien (...) son personas que se infiltran". Esa noche se saldó con 20 detenidos y 43 heridos, varios de ellos por arma blanca.
ACUSACIONES DE BATLLE EN LA RADIO
El 27 de septiembre, Batlle explicó en una entrevista radiofónica que la alcaldesa Ada Colau y los integrantes de la Guardia Urbana reaccionaron con "sintonía" y "lealtad" tras esa noche de violencia. El periodista Josep Cuní discrepó de esta afirmación haciendo referencia a lo que expresaron "los sindicatos" del cuerpo. En ese momento, Batlle interrumpió al conductor del programa para referirse de manera implícita a CSIF. "Este sindicato no es el principal y las actitudes de su portavoz son absolutamente cuestionables. Hemos escuchado unas declaraciones que no son aceptables de ninguna manera. Quiero recordar que este señor ha anunciado una denuncia contra la alcaldesa y contra mí por terrorismo. [...] Demos la importancia que tiene cada cosa y no maximicemos ni sacralicemos las declaraciones que pueda hacer gente que, además, está en unas posiciones de, clarísimamente, de extrema derecha".
En la demanda, presentada el pasado 4 de abril, este sindicato acusa al regidor socialista de querer "descalificar gratuitamente" a la agrupación de funcionarios. Entienden los policías que el propio Batlle no discrepa de la opinión de Zambrano y, pone como ejemplo, otra entrevista de radio del 27 de septiembre en la que el político se refiere a los autores de las agresiones a policías como "gente que, evidentemente, son gente marginal, tampoco pondría etiquetas estigmatizadoras pero claro, son delincuentes. Me importa poco el origen, son delincuentes y como tales deben ser tratados. Evidentemente debemos analizar las circunstancias. Si, si, aquí tenemos un problema también como sociedad, nuestras políticas de juventud, de familias...".
INDEMNIZACIÓN DE 3.000 EUROS
El sindicato policial subraya que las declaraciones de Zambrano sobre los autores de los disturbios "no constituyen una declaración institucional propia" de CSIF, "sino la opinión técnica ofrecida por un mando del cuerpo de seguridad indicado en relación con unos hechos muy determinados y fruto de su conocimiento pericial de dichos hechos y de su probable autoría". La entidad pide que se condene a Batlle a rectifique antes los medios y pagarle una indemnización de 3.000 euros por daños y perjuicios.
En la entrevista con Cuní, el regidor de Seguridad acusó a Zambrano de cruzar "muchas líneas rojas" al acusar a Colau y a el mismo de terrorismo. Un día después, el periodista dio derecho a réplica por alusiones en su programa matinal al portavoz sindical. En su intervención, el guardia explicó que Barcelona asistía a un escenario de "terrorismo urbano", que se estaba produciendo "dejación política y una omisión del deber importante y notorio" y que la Fiscalía debería abrir diligencias por ello a los responsables municipales. El funcionario recordaba algunas de las antiguas reivindicaciones de su sindicato como el uso de armas Taser, spray pimienta y otras herramientas "que la Guardia Urbana niega" a sus policías.
EL ORIGEN DE LOS DELINCUENTES
El periodista catalán señaló que las palabras del sindicalista, cuando se refiere a la delincuencia y a inmigrantes ilegales "se parecen casualmente a las de Vox". A esta afirmación, Zambrano defendió que conocer el origen de los delincuentes no supone estigmatizar la nacionalidad. "Cuando el delincuente es holandés o belga se dice sin problema", seguía el policía en su intervención.
Tras las palabras de Batlle sobre el portavoz del sindicato, CSIF reclamó al concejal una rectificación pública y, al no obtenerla, ha decidido acudir a la justicia civil. ocho meses después. "No podemos consentir que se nos tache de extrema derecha por no pensar como el", explicaba su portavoz este martes.