Mensajes complementarios, pero con una sonrisa en el rostro. El Gremio de Hoteles de Barcelona ha aguantado el tirón, tras la crisis de la pandemia, y ve un cambio sustantivo en el turismo de la ciudad. La subida de los precios de los hoteles, una media del 15% en los meses de verano respecto a 2019, ha logrado que el tipo de turista en la ciudad haya mejorado, con una mayor capacidad adquisitiva. Pero hay sombras. La ciudad está "desgarbada, falta limpieza y hay muchos robos, constantes, en todos los hoteles, con numerosas quejas", según el presidente de la entidad, Jordi Clos.
Las quejas se dirigen hacia el gobierno municipal de la alcaldesa Ada Colau. Clos se ha preguntado sobre el cambio en la contratación de las empresas que se encargan de la limpieza de la ciudad. Y pide que se ponga más atención. También la sensación, pero con hechos muy evidentes, a su juicio, de inseguridad. "En el hall de un hotel, en el momento de cargar con las maletas, en muchas situaciones cotidianas, se producen robos, y eso crea una mala imagen internacional", según Clos, que se ha referido a los esfuerzos del concejal Albert Batlle para atajar el problema, pero no ha dejado de reclamar "muchos más esfuerzos".
UNA MEDIA DE 181 EUROS POR NOCHE
La entidad tiene los datos de los hoteles, otra cosa es el turismo que pasa pocas horas en la ciudad, o que elige otros servicios para pernoctar. Pero las noticias para los hoteleros son buenas, aunque con una subida significativa de los precios y con mayores costes por la subida de la energía. El precio medio de los hoteles de Barcelona se ha incrementado en torno a un 15% en el periodo de abril-agosto de 2022 respecto al mismo periodo de 2019, antes de la pandemia. Y en agosto el precio medio de una noche en un hotel de Barcelona ha sido e 181 euros, "un record que no se conocía, en un mes de agosto", según Clos.
Turistas visitan el Park Güell de Barcelona / EFE
Clos, tras referirse a los problemas de gestión en la ciudad, se ha mostrado favorable a un cambio en el equipo de gobierno municipal de Barcelona, con la petición de que el próximo alcalde mime el sector del turismo y no lo deje en la estacada. Sin realizar una apuesta concreta, se ha referido a Jaume Collboni, el alcaldable del PSC y a Xavier Trias, el posible candidato de JxCat. "Collboni está realizando muchos esfuerzos, en todo lo que puede, y sobre Trias ya veremos, pero, en todo caso, queremos que se respete el turismo", ha remachado Clos.
MÁS COLABORACIÓN PÚBLICO-PRIVADA
Ahora, en septiembre, la valoración es buena. Y las expectativas para otoño "son igual o mejores que en el mismo periodo de 2019", según Clos, que espera que en noviembre y diciembre se aproxime a lo que ocurrió en 2019, teniendo en cuenta que para el sector hotelero se trata de temporad baja.
Los acontecimientos internacionales, la decisión del MWC de tener Barcelona como sede indefinida, todo ello invita al optimismo para el sector, que entiende que la recuperación ha llegado, pese a que algunos mercados internacionales, el asiático principalmente, todavía no se han recuperado. Sin embargo, es la gestión municipal la que puede ensombrecer ese escenario. Lo que se pide, en ese sentido es "una estrategia consensuada y escalada a nivel municipal, metropolitana y de país. No ha habido suficiente diálogo con vecinos y agentes privados".