Indemnizan con 6.000 euros a una camarera despedida por negarse a trabajar semidesnuda
Los dueños del local querían que solo llevara sujetador, culotte y medias, a lo que ella se opuso
5 febrero, 2023 13:00Noticias relacionadas
Una juez de Barcelona ha ordenado a una empresa que readmita e indemnice con 6.251 euros por daños morales a una camarera a la que despidió porque se negó a vestir solo con la poca ropa que le imponían los dueños de un local de copas de la capital catalana: sujetador, culotte y medias.
DERECHO AL HONOR
La titular del Juzgado de lo Social número 4 de Barcelona da la razón a la trabajadora, que prestaba sus servicios contratada por la empresa AlemanProduct SL, y ordena su "inmediata readmisión", sin que ahora se le pueda imponer este tipo de vestimenta, así como que se la indemnice al concluir que la "imposición" de llevar tan poca ropa vulneró su derecho al honor y le causó daños morales.
DOLLHOUSE DE BARCELONA
La trabajadora fue fichada por un contrato temporal por AlemanProduct SL el 14 de febrero de 2020 como ayudante de camarera, con un horario entre las 18.00 y las 2.00 horas y un sueldo bruto de 1.586 euros mensuales, de forma que empezó a trabajar en el local de copas Dollhouse de Barcelona.
La empresa, de acuerdo con su actividad, impuso a la camarera un código de vestimenta específica, que la obligaba a llevar la menor cantidad de ropa posible, en concreto, únicamente bragas, culotte y sujetador.
SITUACIÓN EMBARAZOSA
La trabajadora no se encontraba cómoda con esta vestimenta -cuando "puntualmente" la llevó llegó a sufrir una situación "embarazosa" con un cliente, según la sentencia- por lo que en junio de 2021 empezó a ponerse vestidos o tejanos y ropa con la que se sentía mejor.
El 6 de septiembre de 2021, el encargado del local le llamó la atención y le advirtió de que no podía vestir así, ya que tenía que llevar la poca ropa que le habían indicado, alegando que era lo que los clientes querían, y al día siguiente el jefe de la empresa le insistió que debía vestir como le habían dicho, si bien ella mantuvo su negativa.
Dos días más tarde, la empresa amonestó por escrito a la camarera por negarse a seguir las condiciones de atuendo, y el 12 de septiembre, al comprobar que mantenía su negativa, la obligaron a tomar vacaciones hasta que el 25 de octubre de 2021 le notificaron la rescisión de su contrato.
DESPIDO IMPROCEDENTE
La mujer, representada por el abogado Javier Aranda, recurrió a los tribunales, que le han acabado dando la razón, al considerar improcedente su despido y concluir que la obligación de llevar poca ropa atentó contra su derecho al honor. Por este motivo, la juez acuerda que la empresa indemnice con 6.251 euros a la mujer, por los daños morales ocasionados.