¿Los datos? ¿Qué realidad reflejan? El Círculo Ecuestre ha vivido este lunes una especie de rebelión contra los cuerpos policiales por defender éstos que los delitos han descendido en Barcelona y que la ciudad es “plenamente segura”. Con los números en la mano, la comisaria de los Mossos d’Esquadra, Marta Fernández, pretendía ser taxativa: “El 49% de los delitos son hurtos, ha habido 11 homicidios en 2022, un 40% menos que en 2019 y solo cinco de cada 100 delitos son con violencia e intimidación”. ¿Creíble? No para muchos de los asistentes al debate en el Círculo Ecuestre, que han reclamado más oficinas de denuncias, más policía y más dureza ante la “inseguridad en la ciudad”.

El debate prometía, porque, con la moderación de la periodista Mayka Navarro, el Círculo Ecuestre había reunido a la citada Marta Fernández, como representante de los Mossos d’Esquadra, a María José Ortega, comisaria de la Policía Nacional; a Pedro Velázquez, jefe de la Guardia Urbana y a Luis Sans, presidente de Santa Eulalia y de la Asociación del Paseo de Gràcia.

ALEGATO VECINAL

Los cuerpos policiales, sin negar que los delitos existen y que se ha producido un auge en los de carácter sexual y relacionados con las drogas, han insistido en que Barcelona es una de las ciudades más seguras del mundo y que, cuantitativamente, se han reducido respecto a 2019, el año justo antes de la pandemia.

Asistentes al debate en el Círculo Ecuestre sobre la seguridad en Barcelona / CE

Pero los datos se enfrentan a las percepciones de las personas. Y en el Círculo Ecuestre el clima era otro. Tras varias intervenciones de algunos asistentes, “negando la mayor”, y con la defensa a llevar en la calle “el reloj que se desee”, una de las representantes de las entidades vecinales ha leído un manifiesto, que ya partía de un “rechazo” a la posición de los cuerpos de seguridad. Se trataba de Carolina Torredemer, de la Plataforma de Vecinos Afectados por la Inseguridad en Barcelona. Su alegato, reclamando más presencia policial, más eficacia y más celeridad para facilitar las denuncias, fue aplaudido con fruición por los presentes en el auditorio del Ecuestre, como las otras intervenciones.

También una representabe de los comercios en Diagonal Mar ha incidido en que los tiempos de espera para hacer una denuncia pueden llegar a las cuatro o cinco horas. No la convenció Marta Fernández, asegurando que “la media en Barcelona es de 30 minutos de espera”. Y añadió que cuando se piden citas previas, “muchas de las personas que las formulan después no se presentan”.

¿QUIÉN DICE QUE HAY MÁS INSEGURIDAD?

¿Qué sucede? Las palabras se iban solicitando en el auditorio del Ecuestre. Más bien los asistentes comenzaban a hablar sin tener el micro todavía, generando un cierta sensación de conato de protesta, en total discrepancia con el clima de cierta tranquilidad que deseaban implementar los responsables de los cuerpos de seguridad.

Pedro Velázquez, al frente de la Guardia Urbana, consideró que hay que tener en cuenta la importancia de las percepciones, y que el problema es la “multirreincidencia y los casos relacionados con la droga”. Y añadió que todo se ha complicado más porque se han generado conflictos en el interior de las casas y tan básico es la mejora de la eficacia policial, “como la orientación de la gestión del conflicto” en los hogares, donde ahora, tras la pandemia, las familias pasan mucho más tiempo.

Fue Marta Fernández, más activa, quien recordó que hay 3.100 agentes destinados en Barcelona, una ratio proporcional –algunos grupos políticos como el PSC señalan que los Mossos han descuidado la ciudad-- la que incidió en la cuestión de la percepción tras el varapalo que había lanzado Carolina Torredemer.

Enrique Lacalle, vIcepresidente del Círculo Ecuestre con los ponentes del debate sobre seguridad / CE

“No quiero reprochar nada a nadie ni lanzar nada, simplemente me llamó la atención un dato, y es que cuando se señala que hay más inseguridad, el punto que más crece para justificar esa aseveración es el “porque me lo han dicho o porque lo dicen los medios”. El toque de atención a los propios asistentes del Ecuestre ya estaba dado. Y añadió, en todo caso, que esa percepción obliga a todos “a gestionar el miedo”, esté o no basado en los datos que registran los agentes.

Cerró el acto Luis Sans, que valoró el trabajo policial porque a los delincuentes “se les detiene”, con una petición, que se recuperen los llamados juicios rápidos, como sucedió con los Juegos Olímpicos de 1992. En una petición dirigida a Albert Batlle, presente en el Ecuestre, Sans señaló que es la Generalitat la que debe proporcionar más juzgados con juicios de diez días para los hurtos y de 15 para los delitos más graves.

Pero no hubo consenso. No hay un diagnóstico compartido sobre lo que sucede en Barcelona. En el Círculo Ecuestre, en todo caso, no se creen los datos de los Mossos y de la Guardia Urbana.

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