Se puede considerar que la odisea de estos casi 200 viajeros con destino Bilbao comenzó a las cuatro de la tarde de ayer. En ese momento, una avioneta se quedaba averiada en el centro de la pista del aeropuerto de Ibiza. El caos provocado obligó a retrasar o cancelar una veintena de vuelos, entre ellos el VY3975, que tenía que despegar a las 21.30 horas del domingo para arribar a Loiu unos 60 minutos después.
ABANDONADOS EN EL PRAT
Sin embargo, sus ocupantes no han pisado suelo vizcaíno hasta el mediodía de hoy lunes, tras haber pasado la noche tirados, "sin ningún tipo de atención", en el aeropuerto de Barcelona. La historia de estos pasajeros desborda "indignación", la misma que les ha llevado esta mañana a bloquear el embarque de otros vuelos en El Prat, obligando a la Guardia Civil a intervenir para apaciguar los ánimos. Una decena de agentes, armados incluso con armas largas, se ha personado en el lugar para intentar devolver la calma.
Laura tenía que haber llegado hoy a su trabajo a las 09:00 horas de la mañana en el centro de Bilbao. Ha perdido el día. Habla con un tono de voz entre la rabia y el cansancio. Ha pasado las últimas 15 horas sin dormir, "vagando" por los aeropuertos de Ibiza y Barcelona. "Tiene delito lo que nos han hecho. Nos han engañado y jugado con nosotros como han querido. Una vergüenza".
Tras producirse el incidente con la avioneta, la compañía Vueling retrasó la salida de su vuelo entre Ibiza y Bilbao a la medianoche. El aparato despegó al filo de las doce y cuarto. "Tenían claro que no íbamos a llegar a Loiu a tiempo (el aeropuerto de Bilbao no admite más aterrizajes a partir de las 00.52 horas) y aún así decidieron salir", cuenta Laura.
SIN ALTERNATIVAS
El 'Airbus 320' puso rumbo directamente a Barcelona, donde se encuentra la sede operativa de Vueling. Allí la compañía tiene más infraestructura y suele recolocar en hoteles a los pasajeros afectados por problemas técnicos, meteorológicos o de otro tipo. Sin embargo, esta vez, según denuncian los usuarios, "nadie nos ha atendido y no nos han llevado a ningún alojamiento", tal y como obliga la normativa.
"Hemos pasado la noche en el suelo, como hemos podido, con varios bebés llorando en los brazos de sus madres...". La compañía les ha asegurado que saldrían a las cinco de la mañana hacia Bilbao. Algo también que parecía muy difícil puesto que el aeropuerto de Loiu no admite los primeros aterrizajes hasta las 06.30 horas.
El malestar de los pasajeros ha ido creciendo. Ha llegado un momento en el que se han amotinado y han optado por bloquear el embarque a otros vuelos. Por este motivo, ha tenido que intervenir la Guardia Civil, cuya presencia también había sido requerida por varios de los viajeros, que querían presentar una denuncia por el "maltrato" y la situación vivida.
UNA ODISEA
Sobre las diez de la mañana, los afectados han subido a un avión. El aparato sufría problemas eléctricos y tampoco contaba con servicio de catering. Según el relato de Laura, han permanecido cerca de una hora allí sentados, esperando el despegue.
Sobre las 11.00 horas, el piloto se ha dirigido a los ocupantes del aparato para pedir disculpas por toda la odisea vivida. "Estoy rojo de vergüenza", llega a admitir, según se puede escuchar en un vídeo que los propios afectados han grabado. Finalmente, los 180 afectados han llegado a Loiu a las 12.00 horas. "Ha sido lamentable".
La aerolínea, por su parte, ha pedido disculpas y ha asegurado que sufrió problemas operativos por lo sucedido con la avioneta averiada en el centro de la pista de Ibiza. "Nos haremos cargo de los gastos incurridos por parte de los pasajeros afectados durante el desvíos del vuelo". Los pasajeros se han organizado para presentar una reclamación conjunta.