Los Mossos d'Esquadra investigan quién ha sido el responsable de la situación de alarma que ha tenido lugar en la plaza de Catalunya de este martes. Un amplio dispositivo de seguridad se ha desplegado en la céntrica plaza barcelonesa y se ha suspendido el servicio de transporte público en varias paradas de metro, Rodalies y FGC al recibir una nueva falsa alarma por bomba.

Detrás de todo estaba un objeto dejado en una papelera en la estación. Era un dispositivo de alarma muy común en los patinetes eléctricos, según ha explicado la policía catalana en un tuit. Ese pequeño artefacto ha movilizado a las unidades TEDAX, canina, BRIMO y ARRO, así como gran cantidad de agentes del cuerpo. Junto a ellos, también se han movilizado dotaciones de agentes de la Guardia Urbana, del SEM y de los bomberos de Barcelona.

COLAPSO EN EL CENTRO

Para garantizar la seguridad de los viajeros cuando todavía no se había esclarecido qué era el artefacto, los agentes han solicitado el desalojo de parte de las líneas 1 y 3 del suburbano, la estación de FGC y la de Rodalies, cortando la circulación de las líneas R1, R3 y R4.

Vigilantes del metro desalojando a los pasajeros durante la tarde de este martes / LUIS MIGUEL AÑON

Una vez desplegados los agentes, miembros de la unidad canina han entrado y certificado que no era un explosivo. Después, la unidad TEDAX ha utilizado un robot para manipular la alarma y retirarla de la basura en la que se encontraba.

El centro barcelonés ha vuelto a la calma un rato después de que finalizara el operativo pasadas las 20:00 horas.

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