Elite Taxi se alza en pie de guerra. La asociación mayoritaria de taxistas de Barcelona ha preparado una patrulla de 150 conductores que vigilarán que ciertos reductos de taxistas no estafen a los turistas.
En su primera noche vigilando la capital catalana ya se han producido las primeras intervenciones, cuando varios conductores han rociado con extintores a taxistas que pretendían cobrar más de 50 euros a turistas a la salida del Casino de Barcelona y en los alrededores de la gran explanada del Fòrum.
Este es un problema que se ha acentuado este año, cuando el repunte del turismo y la escasez de taxis, en especial a altas horas de la noche, convierten a los viajeros extranjeros en objeto de estafas. A comienzos de 2023, Élite Taxi denunció los hechos a la administración, que no actuó, por lo que más de un centenar de taxistas han decidido ahora comenzar a movilizarse por cuenta propia.
Cientos de taxis aparcados en el paseo de Gràcia durante una manifestación / GALA ESPÍN
El procedimiento es el siguiente: 150 conductores aguardan en los puntos clave de la noche barcelonesa, como el Fòrum, el Casino, el Hotel Vela o las afueras de las discotecas. Cuando detectan a un turista que está siendo robado, pasan al ataque y rocían el interior del vehículo con extintores. “Sobrevivimos como fumigadores de ratas: si tienes un problema y nos encuentras, podremos ayudarte”, señalan a Metrópoli fuentes de Élite Taxi.
DECLARACIÓN DE GUERRA
“No podemos permitir que las ratas estafen en nombre del amarillo y el negro: las patrullas nocturnas son la única solución que nos queda”, claman. “Salimos a por todas y no nos va a temblar el pulso con nadie: os declaramos la guerra y nos veremos las caras cuando menos os lo esperéis”, amenaza Élite Taxi en un comunicado interno al que este digital ha tenido acceso.
La asociación también ha avisado que está buscando nuevas formas de intervenir, “siempre dentro del marco de la ley”. A su vez, siguen reclamando a la administración que este tipo de estafas conlleven la inmovilización del taxi y una multa de más de 4.000 euros. “Un emblema de la ciudad no se puede usar para robar a la gente”, advierten.
OTRAS ACTUACIONES
El proceso es parecido que el que ya inició Élite Taxi contra los ‘conductores piratas’ del Aeropuerto de El Prat. En ese caso, los taxistas de Barcelona se dieron cuenta de que muchos vehículos sin licencia se apostillaban a la salida del aeropuerto para ofrecer tarifas desorbitadas a los recién aterrizados.
El proceso de esta asociación fue señalar a los ilegales, silbando frente a sus vehículos, hasta expulsarlos de la zona. De esta forma, terminaron reduciendo en un 80% el número de trayectos ilícitos.
Uno de los taxis 'piratas' en el Aeropuerto de Barcelona / CEDIDA