La entidad vecinal Eixample Respira ha propuesto crear, durante las fiestas de Navidad, una zona en el centro de Barcelona donde el tráfico de coches no esté permitido. La asociación pide que, los fines de semana y los festivos por la tarde, no se pueda circular por plaza Catalunya, plaza Universitat y las calles aledañas al paseo de Gràcia, Rambla Catalunya y Gran Via.
PROHIBIR LOS COCHES
El objetivo de esta medida es que los peatones “puedan disfrutar del alumbrado de las calles, pasear por la ciudad, visitar las ferias y realizar las compras de esta época con una mejor calidad del aire, sin ruido ni atascos y con mucho más espacio disponible”.
“Es habitual que la Guardia Urbana acabe restringiendo la circulación por según qué calles para intentar aligerar el colapso”, ha sostenido la entidad, que ha pedido que estos cortes se hagan por avanzado. Han asegurado que sería una intervención en el tráfico similar a la de las dos últimas ediciones de Sant Jordi, que “se ha llevado a cabo con gran éxito”.
AGLOMERACIONES DE GENTE
La Guardia Urbana de Barcelona ha precintado el paseo de Gràcia para evitar aglomeraciones de personas haciéndose fotos en zonas no peatonales, una práctica que se ha vuelto recurrente las últimas semanas.
El modus operandi siempre es el mismo: se esperan a que el semáforo se ponga en rojo para ponerse en medio de la calzada y así conseguir la foto ideal. Esto pone en peligro su seguridad y la de los conductores, que tienen que ir esquivando a los fotógrafos imprudentes.
Por su parte, la asociación de comerciantes Barcelona Oberta ha asegurado que "no esperaban que los transeúntes se quedaran en medio de la calzada". Para evitar más peligros, plantean que de cara al año siguiente se ponga la iluminación en las calles laterales, "para evitar que las personas corran riesgos".