Fábrica de Wallbox en Sant Andreu de la Barca

Fábrica de Wallbox en Sant Andreu de la Barca Wallbox

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Wallbox cierra su fábrica de Sant Andreu de la Barca

La decisión responde a una serie de medidas destinadas a afrontar las dificultades económicas derivadas de la caída de la producción de vehículos eléctricos en Europa y Estados Unidos

1 marzo, 2024 08:45

La empresa Wallbox, fabricante de cargadores con sede en Barcelona, ha comunicado el cierre de su planta en Sant Andreu de la Barca, activa desde 2015. La decisión responde a una serie de medidas destinadas a afrontar las dificultades económicas derivadas de la caída de la producción de vehículos eléctricos en Europa y Estados Unidos.

Pese a anunciar el cese de la actividad de su empresa en este municipio del área metropolitana este jueves, 29 de febrero, Wallbox cerró la planta hace medio año. “En los últimos meses, el centro solo operaba como almacén, ya que la actividad fabril se trasladó al centro de la Zona Franca a inicios del 2023”, ha anunciado Enric Asunción, consejero delegado y cofundador junto a Eduard Castañeda.

Traslado a la Zona Franca

Los empleados que hace seis meses quedaban en los tres almacenes de Sant Andreu fueron trasladados a la fábrica de la Zona Franca. Aunque la empresa no detalla la cifra de afectados, asegura que “son muy pocos”. Esta medida forma parte de un plan de recorte de 60 millones de euros implementado por la empresa, que incluye ocho millones en costes laborales y 52 millones en gastos operativos.

Además de Sant Andreu, Wallbox ha cerrado oficinas en Dinamarca y Australia. Actualmente, la empresa mantiene 21 despachos en nueve países de todo el mundo, con un total de 1.350 empleados, cifra que incluye a los 291 trabajadores incorporados tras la adquisición del grupo ABL en octubre de 2023.

Estancamiento global del sector

Este año, la empresa descarta recortes significativos, aunque tiene previsto mejorar la “eficiencia” en algunos departamentos, con lo que todo apunta a que podrían producirse más despidos. “Estamos centrados en alcanzar la rentabilidad cuanto antes. Queremos que el 2024 sea el ejercicio del ebitda positivo”, ha anunciado Jordi Lainz, director financiero.

Los resultados de 2023 reflejan cómo la facturación se mantuvo estable en 143,7 millones de euros, una cifra ligeramente por debajo de los 144,1 millones de 2022 y que la empresa justifica por el estancamiento global del sector.