Cientos de trabajadores de limpieza de Barcelona reclaman "justicia" por la muerte de Montse Aguilar

Centenares de trabajadores del servicio de limpieza de Barcelona se han concentrado este miércoles a las puertas de la sede de FCC en Barcelona. Los barrenderos y limpiadores municipales protestan contra la muerte de Montse Aguilar, la empleada de la adjudicataria que murió tras una jornada en plena ola de calor el pasado sábado, 28 de junio.

El sindicato convocante de la manifestación, CGT, ha responsabilizado directamente a la empresa y al Ayuntamiento de la muerte de la trabajadora, pues para cuando ocurrieron los hechos, ya se habían interpuesto 16 denuncias ante Inspección del Trabajo que terminaron en sanción o requerimientos por parte del ente laboral.

Bajo el lema "El calor extremo también es violencia laboral", los manifestantes han reclamado "justicia" por la compañera fallecida en la calle de Balmes, desde donde ha discurrido la marcha hasta la plaza de Sant Jaume, sede del Ayuntamiento.

Pidió ayuda

Montserrat tuvo que trabajar bajo unas temperaturas inaguantables, con un uniforme que no transpiraba elaborado con poliéster y, aunque comenzó a encontrarse mal, según el relato de su familia, tuvo que terminar el turno.

A pesar de que, en un primer momento, se argumentó que llevó a cabo sus funciones con normalidad y que nunca pidió ayuda, la familia salió al paso y desmintió estos hechos. La trabajadora sufrió dolor en varias partes de su cuerpo, agotamiento e incluso mareos. Nadie la llevó a un centro médico ni llamó a emergencias.

La muerte de Montse

Fue cuando llegó a su domicilio que pudo contestar un mensaje a un compañero en el que dijo que "creía que se moría". Escasos minutos después, se desplomó, golpeándose la cabeza, por el momento causa oficial de su fallecimiento.

Tanto el sindicato como su familia están esperando a los resultados de la autopsia judicial para conocer si, cuando cayó inconsciente, fue a causa de las altas temperaturas que tuvo que soportar durante aquella tarde.

Manifestación por la muerte de Montse Aguilar en Barcelona CGT

Empresa y Ayuntamiento, en el punto de mira

De confirmarse esta teoría, tanto el sindicato como la familia contempla interponer demandas contra FCC el Ayuntamiento de Barcelona.

Al tratarse de situaciones ampliamente denunciadas, los anarcosindicalistas consideran estos accidentes laborales de "asesinatos que se producen en el trabajo cada año".

A la concentración, que ha contado con la participación de otras secciones sindicales a modo de solidaridad, también ha asistido la hermana de Montse Aguilar, que desveló el pasado miércoles que la situación era tan crítica que durante el velatorio, llegaron a ver cómo una barrendera que trabajaba en las inmediaciones se desplomaba delante de ellos.

20 incidencias este 2025

Este mismo miércoles, el Ayuntamiento de Barcelona ha anunciado que en lo que va de año se han contabilizado --provisionalmente-- 20 incidencias en trabajadores debido a cuestiones relacionadas con el calor, ya sean, por ejemplo, golpes o insolaciones.

Manifestación por la muerte de Montse Aguilar en Barcelona CGT

No obstante, se trata de casos registrados y que han requerido de intervención de los servicios de emergencias e incluso hospitalización. De estos, 12 los habrían sufrido trabajadores de limpieza y recogida de residuos. El resto, de otros sectores municipales.

Medidas municipales

Tras el fallecimiento --y varios casos de golpes de calor denunciados por sindicatos--, el gobierno municipal se reunió con las cuatro empresas licitadoras del servicio con el objetivo de actualizar las medidas y protocolos de prevención de riesgos laborales.

Medidas como, a partir de los 34º C, adaptar las rutas para coincidir con más zonas sombreadas, garantizar una pausa mínima de cinco minutos para la rehidratación cada hora o distribuir una botella isotérmica de un litro para los trabajadores.

Operarios de la limpieza en las playas de Barcelona Simón Sánchez

Estas medidas, tal y como avanzó Metrópoli, fueron acogidas con una mezcla de escepticismo e indignación por la gran mayoría de secciones sindicales, que las consideraron insuficientes y pidieron  soluciones definitivas para una realidad que se impone, que son los trabajadores que en las últimas semanas han terminado en el hospital por acudir a trabajar.