La obligación de contar con un seguro de responsabilidad civil y un registro oficial para patinetes eléctricos y otros vehículos de movilidad personal (VMP) no entrará en vigor el 2 de enero de 2026 como estaba inicialmente previsto.
La Dirección General de Tráfico (DGT) ha confirmado que la normativa aún no está completamente definida, ya que falta aprobar el real decreto que debe regular de forma completa la inscripción de estos vehículos y el régimen de aseguramiento correspondiente.
Un agente de la Guardia Urbana de Badalona revisando un patinete
Seguro aplazado
Esto significa que, de momento, los usuarios de patinetes eléctricos podrán circular sin estar inscritos en un registro específico ni contar con el seguro obligatorio vinculado a ese registro. Al menos hasta que se publique y entre en vigor la normativa definitiva.
A pesar de ello, la DGT ha subrayado que para los VMP que pesen más de 25 kg y puedan superar los 14 km/hora sí será exigible un seguro de responsabilidad civil, aunque no estén inscritos.
Patinetes eléctricos registrados durante un control de la Policía Local de Santa Coloma
Este requisito tendrá que cumplirse incluso durante el periodo transitorio que ha fijado Tráfico.
Equiparación de vehículos
La modificación de la ley que establecía esta obligación forma parte de la Ley 5/2025 sobre seguro obligatorio de vehículos, que ampliaba esta cobertura también a los patinetes eléctricos y otros VMP como monociclos y hoverboards.
La intención de la medida es equiparar estos medios de transporte a otros vehículos en términos de responsabilidad y protección frente a terceros.
Sin fecha definida
Por ahora, no hay una nueva fecha establecida para que el registro y el seguro obligatorio sean exigibles para todos los VMP ligeros.
Por ello, los usuarios que utilicen patinetes eléctricos en sus desplazamientos urbanos quedan en una fase transitoria hasta que se complete el desarrollo reglamentario.
Control de patinetes en L'Hospitalet
En Barcelona, mano dura
En Barcelona y su área metropolitana, el debate sobre la regulación de los patinetes eléctricos sigue especialmente vivo.
El Ayuntamiento de Barcelona mantiene una política restrictiva sobre el uso de los VMP, con limitaciones de circulación, controles frecuentes de la Guardia Urbana y sanciones por infracciones como circular por aceras, no llevar casco en los tramos obligatorios o incumplir las ordenanzas municipales.
Un usuario de patinete en Barcelona
Municipios del entorno metropolitano como L’Hospitalet, Badalona, Santa Coloma o Sant Adrià han intensificado en los últimos meses los dispositivos policiales contra usos indebidos de patinetes, ante el aumento de accidentes y conflictos con peatones.
Este refuerzo del control municipal contrasta con el aplazamiento de la normativa estatal sobre el seguro obligatorio, lo que mantiene, por ahora, un escenario de mayor presión sancionadora a nivel local, pero sin la exigencia generalizada de aseguramiento para los usuarios de patinetes eléctricos.
