Arranca la época de calçots y con ella la búsqueda por encontrar la masía perfecta (y cerca de Barcelona) donde degustar esta delicia de temporada. 

Hacer una calçotada suele ser un planazo. Una excusa ideal para reunir a un gran grupo y disfrutar de un día diferente en un ambiente distinto, divertido y agradable. Pero muchas veces suele ser complicado encontrar el lugar perfecto o desplazarse hasta una masía lejana. Es por eso que BMagazine ha hecho un listado de los mejores lugares para comer buenos calçots sin salir del Área Metropolitana de Barcelona

MASÍA CAN VILALLONGA

Comer este plato típico de la gastronomía catalana en una masía del siglo XIV no tiene precio. Can Vilallonga es un antiguo edificio de la Edad Media que en su día formó parte de las tierras del monasterio del municipio de Sant Cugat del Vallès (Barcelona). 

Situada en el municipio metropolitano, a menos de 30 minutos en coche y tres cuartos de hora de la ciudad, es una de las mejores (y más cercanas) opciones para comer una buena calçotada.

Esta masía es una de las mejores ubicaciones, según Tripadvisor, para comer estas cebollas asadas con salsa romescu. Además los comensales también recomiendan sus carnes a la brasa. Eso sí, los usuarios del comparador avisan de la importancia que tiene reservar con tiempo, ya que suele estar lleno. 

Dirección: calle del Oceà Atlàntic, 80, Sant Cugat del Vallès (Barcelona)

Calçots en Can Vilallonga fotografiados por un comensal / TRIPADVISOR

NOU DE CAN MARTÍ

Situado en el pasaje de la Font del Mont, muy cerca de la carretera de les Aigües, se encuentra Nou de Can Martí, un restaurante con unas vistas únicas ideales para una gran calçotada. La clientela acude por lo cercano que está del centro de Barcelona, el excelente servicio que tiene este establecimiento y su comida elaborada con productos de calidad.

En la carta de este antiguo merendero destacan los calçots, pero también por su carne a la brasa o sus clásicos platos como los callos o las mongetas con butifarra. 

Dirección: pasaje de la Font del Mont, 4, Barcelona

Calçots en Nou de Can Martí fotografiados por un comensal / INSTAGRAM

CAN CORTÈS 

Can Cortès es otro de los mejores lugares para comer una calçotada. Ubicado en la carretera de l'Arrabassada el restaurante ofrece unas vistas espectaculares de la montaña de Collserola

Este restaurante ofrece menús de calçotada para grupos pequeños o empresas, por lo que la atención es la mejor. En el precio cerrado entra todo tipo de carnes a la brasa, calçots ilimitados, salsa romescu casera, bebidas, postre: todo lo necesario para comer de la mejor manera y pasar un día increíble entre amigos o familia. 

Dirección: Avenida de Can Cortés, 36, Sant Cugat del Vallès (Barcelona)

Teja de calçots antes de ir a la brasa en la masía Can Cortès / INSTAGRAM

MIRADOR DE CAN CASES

El Mirador de Can Cases, ubicado en el Parc de Collserola, es una masía del siglo XVI da cabida a este restaurante que cuenta con una terraza-vermutería ideal para hacer una buena calçotada. Las espectaculares vistas que tiene este mirador conquistan a sus comensales, que suelen acudir al establecimiento cuando hace un buen día. 

Aparte de los calçots, que son una de las especialidades de la casa, destacan las alcachofas y la carne a la brasa, los caracoles a la llaun o los arroces. 

Dirección: camino de Can Cases, 15, Les Planes (Barcelona)

Terraza del Mirador de Can Cases, uno de los mejores lugares para hacer una calçotada / INSTAGRAM

CAN BORRELL

Can Borrell cuenta con más de quince menús para disfrutar de una buena calçotada en una auténtica masía. Situado en Sant Cugat del Vallès es un restaurante típico catalán que ofrece la gastronomía más típica y deliciosa de la zona. 

Los usuarios de Tripadvisor destacan su abundancia y la calidad de sus productos. También aseguran que los caracoles a la llauna son excelentes, al igual que su amplia selección de carnes a la brasa o platos como los canelones o los macarrones hechos al horno. 

Dirección: Carretera de Horta a Cerdanyola BV-1415, Km 3, Cerdanyola del Vallès (Barcelona)

Masía Can Borrell, en la que se puede degustar una buena calçotada / CAN BORRELL

CAN TRAVI NOU

Escondida en el barrio de Horta se encuentra una preciosa masía catalana que data del siglo XVII. En su interior se ubica el restaurante Can Travi Nou, que cuenta con un jardín de ensueño (ni más ni menos que la ubicación dondde se rodó parte de Vicky Cristina Barcelona, de Woody Allen). 

Este establecimiento centenario sirve calçotadas en un ambiente idílico, que hace que sus comensales se sientan fuera de la vorágine urbanita. Aparte de los deliciosos calçots, en su carta también destacan los arroces y las carnes a la brasa. 

Dirección: calle de Jorge Manrique s/n (Parc de la Vall d’Hebrón)

Calçots con romescu servidos en Can Travi Nou / INSTAGRAM

CAN CORTADA

 Can Cortada es otro referente gastronómico del barrio de Horta por sus calçotadas. Forma parte del mismo grupo que Can Travi Nou y, por ello, su gastronomía es impecable. Este establecimiento está especializado en cocina tradicional catalana, sobre todo en carnes a la brasa. 

El restaurante está ubicado en un castillo que forma parte del Patrimonio Artístico de Barcelona, por eso sus comensales desconectan de la ciudad en un espacio único. 

Dirección: avenida del Estatut de Catalunya, Barcelona

Calçots cocinados en el castillo de Can Cortada / INSTAGRAM

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