Pintarroja con morcilla y piparras del restaurante Hisop* de Barcelona, con una estrella Michelin

Pintarroja con morcilla y piparras del restaurante Hisop* de Barcelona, con una estrella Michelin Hisop

Gastro

El restaurante con Estrella Michelin de Barcelona donde comer por menos de 50 euros

Publicada
Actualizada

Noticias relacionadas

Año tras año, Barcelona reúne a más restaurantes con Estrella Michelin. La última gala celebrada en Murcia volvió a poner de manifiesto la potencia gastronómica de la ciudad, que suma cuatro nuevos establecimientos en 2025: Fishology, Mae, Prodigi y Teatro Kitchen & Bar.

Las nuevas incorporaciones sitúan a la capital catalana con 40 estrellas, la ciudad de España que más ostenta. Algunos lucen la insignia desde hace más de 15 años: hablamos de Hisop, un restaurante que abrió hace dos décadas en Sarrià-Sant Gervasi (número 9 del pasaje de Marimon) y que se llevó su primera y única estrella en 2010.

Blini de angulas de monte con erizos del restaurante Hisop* de Barcelona, con una estrella Michelin

Blini de angulas de monte con erizos del restaurante Hisop* de Barcelona, con una estrella Michelin Hisop

El secreto de su éxito no solo radica en la calidad y presentación de sus platos, especialmente en que mantienen los pies en la tierra sin olvidar sus orígenes. “Cuando ganamos la estrella decidimos que todo seguiría igual”, explicaba el chef Oriol Ivern hace unos años a Metrópoli. Esta sencillez se ha trasladado en los precios, los que convierten Hisop en una de las opciones más económicas de la ciudad gracias al menú de mediodía de 40 euros –sin bebida incluida–.

Menú de mediodía

El menú de mediodía, llamado ‘Àpat’, existe desde los inicios de Hisop. Aunque se plantearon retirarlo de la carta hace unos años, finalmente decidieron mantenerlo porque, según destacó Ivern a este digital, “ganar una estrella no significa cambiar aquello que funciona”.

La propuesta de 40 euros incluye dos aperitivos, un entrante –a elegir entre dos propuestas–, una carne o un pescado como segundo y queso o postres para terminar. La bebida y el café no están incluidos. Esta opción está disponible todos los mediodías de lunes a viernes.

Merluza con nueces, trufa y macís del restaurante Hisop* de Barcelona, con una estrella Michelin

Merluza con nueces, trufa y macís del restaurante Hisop* de Barcelona, con una estrella Michelin Hisop

Plato insignia

Ivern describe su gastronomía como una mezla entre la catalana y la contemporánea. Lo más curioso de Hisop es que nunca repiten los platos: 21 años abiertos sin una misma propuesta en su menú degustación. Lo mismo sucede con los de su carta, adaptada a los productos de temporada. Tan solo cuentan con un plato insignia que se mantiene fijo todos los días del año: el salmonete con mayonesa de moluscos, que en la carta cuesta 30 euros.

Salmonete del restaurante Hisop* de Barcelona, con una estrella Michelin

Salmonete del restaurante Hisop* de Barcelona, con una estrella Michelin GUÍA REPSOL

Menú degustación

El menú degustación tiene un precio de 90 euros, que asciende a 120 si se marida con vinos. Lo forman nueve platos que combinan carnes, pescados y verduras. Todos ellos también pueden encontrarse por separado en la carta, con valores que oscilan los 30 euros. Entre los entrantes, los comensales pueden disfrutar desde lengua de ternera hasta mollejas con angulas, pasando por la caballa, unas gambas o arroz de cangrejo azul, una exquisitez. 

Tanto en los entrantes, como en las carnes, los pescados y los postres, siempre hay cinco opciones entre las que elegir. 

Otros reconocimientos

Desde que abrió sus puertas en 2001, Hisop acumula numerosos reconocimientos, entre ellos una Estrella Michelin desde 2010, un Sol a la Guía Repsol desde 2009, el premio al Millor Cuiner Jove 2007 por la Academia Catalana de Gastronomía, Identitá Golose 2011 en Italia y el Grand Prix Le Fooding 2004 en París. 

El restaurante, que debe su nombre a una planta aromática propia de la cultura mediterránea, es el lugar idóneo para los barceloneses más foodies que tengan ganas de adentrarse en la alta cocina pero sin gastarse mucho dinero.