Montaje de Coppola con el restaurante de fondo en Barcelona
El restaurante de Barcelona que Coppola recomendó a Nicolas Cage y también enamoró a Spike Lee: "Le habló de nosotros"
Escondido tras un pasillo sin rótulo y sin carta, el restaurante ha conquistado a comensales anónimos y celebridades gracias a su cocina de mercado, su servicio cercano y una propuesta basada en producto fresco del mar
Ni calçots ni pa amb tomàquet, este es el plato favorito de Carles Francino: “Soy exactamente igual de feliz”
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Barcelona es una ciudad que no solo brilla por sus monumentos o su oferta turística, sino también por los rincones ocultos y establecimientos emblemáticos que guardan siglos de historia, tradición y discreto encanto.
Más allá de la Sagrada Família y las Ramblas, la ciudad condal esconde bares sin letrero, restaurantes ocultos tras portales anónimos y locales legendarios. Son espacios que sobreviven al paso del tiempo gracias a su autenticidad, su fidelidad a la calidad y una clientela que los convierte en verdaderos secretos a voces.
Escondido tras un pasillo discreto en el barrio del Born, Passadís del Pep se ha alzado como uno de los restaurantes más emblemáticos de Barcelona y enigmáticamente uno de los favoritos de Hollywood.
Carabineros en el Passadís del Pep
Su fama se extiende entre actores, directores y realeza, gracias a una combinación única de privacidad, calidad gastronómica y un método de recomendación que continúa siendo infalible: el boca a boca.
Un tesoro escondido con clientela de élite
Desde su apertura en 1979, Passadís del Pep ha mantenido su esencia intacta: no tiene cartel, no tiene carta, y ni siquiera un letrero visible desde la calle.
![Montaje de Daniel Brühl es su barrio favorito de Barcelona](["https:\/\/a2.elespanol.com\/metropoliabierta\/2025\/07\/25\/vivir-en-barcelona\/1003742676791_14925981_320x180.jpg"])
Se accede por el portal de una comunidad de vecinos y, tras un pasillo estrecho, se abre una puerta que conduce a un vasto comedor elegante en su sencillez.
Interior de la cocina del restaurante Passadís del Pep
Por allí han pasado George Clooney, Harrison Ford, Sigourney Weaver, Bono, Shakira, Margaret Thatcher, Woody Allen, Robert De Niro, Ricky Martin, incluso la Familia Real española.
Una cocina del mar sin menú fijo
En este restaurante no se elige: el maître recita cada día lo fresco del mercado y los platos llegan a la mesa sin carta previa. Navajas, cigalas, jamón ibérico, gambas, arroces, rodaballo… las opciones varían según la pesca del día.
![Fotomontaje del actor Àlex Monner con su restaurante favorito de fondo](["https:\/\/a2.elespanol.com\/metropoliabierta\/2025\/07\/18\/gastro\/1003742675052_14892940_320x180.jpg"])
La especialidad principal reside en el marisco salvaje porque cada día les entra género nuevo y cada día lo terminan. Los lunes, también. Y nada es de piscifactoría, es todo salvaje. En este restaurante, por ejemplo gastan unas lubinas de cinco y ocho kilos, asegura Modesto, encargado del restaurante desde hace más de 20 años.
Navajas que se sirven en el restaurante Passadís del Pep en Barcelona
Hollywood recomienda Passadís del Pep
Una de las causas del éxito internacional de Passadís del Pep es la recomendación directa entre grandes estrellas. “Spike Lee, el director de cine, le habló de nosotros al músico Chris Rea y Nicolas Cage vino porque se lo recomendó Francis Ford Coppola”, relata Modesto.
Coppola, en efecto, se convirtió en cliente habitual, y no dudó en aterrizar con su jet privado en Barcelona en 2015 para cenar allí tras recibir el Premio Princesa de Asturias.
Modesto recuerda además varias escenas memorables: “Harrison Ford cenó con Calista Flockhart en el reservado, Richard Gere con dos chicas y Michael Douglas solo y circunspecto”.
Interior del comedor del restaurante Passadís del Pep en Barcelona
Incluso durante una visita de Arnold Schwarzenegger en los años 90, al descubrir que no tenían pollo, una vecina trajo uno desde casa y “un rato después se lo comía Terminator”.
![Un fotomontaje de Marc Giró sobre un fondo del restaurante El Racó d'En Binu](["https:\/\/a2.elespanol.com\/metropoliabierta\/2025\/07\/21\/gastro\/1003742675480_14900227_320x180.jpg"])
Un ambiente íntimo con encanto y bodega espectacular
El restaurante tiene un aire clásico, con vigas de madera, paredes de piedra y obras de artistas como Antoni Tàpies o Perico Pastor adornando el interior.
Cuenta con una bodega con más de 350 referencias y sirve licores al final de la comida: “De Niro se quedó alucinando, me dio su cámara y me rogó que le hiciese una foto desde la escalera en la que se viese toda la mesa llena de botellas”.
Plato servido en el restaurante Passadís del Pep
Un legado que perdura
Fundado por Joan Manubens en 1979, su hijo Joan continúa al frente con la filosofía de no tocar lo que funciona. “Cuando las cosas van bien, lo mejor es no tocarlas”, asegura.
“El día que no pueda garantizar la máxima calidad, no abriré al público” son frases recurrentes que reflejan el compromiso con la excelencia
Pasando de Margaret Thatcher a Serrat, de Trump a De Niro, de Woody Allen al Rey Juan Carlos, Passadís del Pep se ha consolidado como un lugar legendario, reconocido por su autenticidad y discreción. Su éxito no radica en la publicidad tradicional, sino en el murmullo constante de clientes satisfechos que lo recomiendan dentro y fuera de España.
