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El CE Europa sigue agotando las vías legales para mantenerse en el Nou Sardenya tras su histórico ascenso de la temporada 2024/2025 a Primera Federación, la tercera competición del fútbol español y el paso previo a la competición profesional. 

El club ha presentado un recurso ante el Consejo Superior de Deportes (CSD) para seguir disputando los partidos en el estadio del barrio de la Vila de Gràcia tras las negativas de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) a modificar la normativa o a conceder una moratoria de un año. 

El texto presentado por la entidad presidida por Hèctor Ibar solicita la impugnación de la normativa vigente y, “de forma subsidiaria” ha reclamado “una moratoria mínima de 12 meses, que nos permita disputar íntegramente la temporada 2025-2026 en el Nou Sardenya”.

Descartadas las obras para instalar césped natural en el estadio de Gràcia, la voluntad del club ha sido obtener el permiso para disputar esta primera temporada mientras se buscaba una opción definitiva junto con el consistorio, algo que no ha acabado sucediendo. 

El estadio del Nou Sardenya en una imagen de archivo Òscar Gil Coy

Firmes para mantener el Nou Sardenya

Pese a las negativas que han recibido hasta el momento, el club, lejos de rendirse, ya ha anunciado que va a luchar hasta el final sin renunciar a su estadio, que han convertido en un auténtico fortín junto con sus aficionados. 

“Nos mantenemos firmes en la voluntad de continuar jugando nuestros partidos exclusivamente en el Nou Sardenya”, han señalado desde el club en un comunicado.

“El club emprenderá todas las acciones administrativas y legales necesarias”, han defendido en el texto. 

Desde la directiva han asegurado a Metrópoli que esta no es el último recurso para seguir en el estadio municipal del barrio y que se podrán tomar otras medidas en función de la resolución del organismo deportivo. 

Escudo del CE Europa CE Europa

Can Dragó, la solución

A la espera de la respuesta del organismo nacional, el club y el Ayuntamiento han acordado inscribir el campo de césped natural que hay en las instalaciones municipales de atletismo de Can Dragó como recinto alternativo para disputar los encuentros a partir del 15 de enero de 2026. 

El cambio, anunciado por el consistorio y el club, ha levantado los recelos del Club d’Atletisme de Nou Barris, entidad que utiliza actualmente el recinto deportivo municipal y que ha mostrado su preocupación ante que el traslado pueda afectar su actividad. 

En un comunicado han lamentado que no se les haya informado previamente y ha dejado claro que “no renunciará a seguir haciendo los entrenamientos y actividades habituales durante toda la próxima temporada”. Asimismo ya han asegurado que emprenderán las acciones necesarias para evitar que el traslado afecte a su actividad habitual.  

Césped artificial del Nou Sardenya Metrópoli

Oposición del Ayuntamiento

El cambio de campo ha levantado polémica, no solo entre los dirigentes de la entidad, sino también en el mismo Ayuntamiento, que han atacado a la RFEF y la normativa que rige una competición no profesional.

El concejal de deportes del Ayuntamiento de Barcelona, David Escudé, cuestionó el reglamento federativo y se preguntó públicamente si las ciudades deben adaptarse a los reglamentos “de una entidad privada”

Más duro fue el conejal de Nou Barris, Xavier Marcé, que tildó a las federaciones de “nazis” durante el pleno celebrado el pasado 22 de julio. “Yo me cargaría todas las federaciones de fútbol y tal… pero existen”, añadió el edil socialista. 

Ante el revuelo de las declaraciones– la Unión de Federaciones Deportivas de Catalunya (UFEC), que las tildó de “inadmisibles” e “irresponsables”–, Marcé pidió disculpas: “Fue un comentario absolutamente inapropiado, no querido e inaceptable. Me siento avergonzado”.

“Mis palabras en ningún caso representan el pensamiento del Gobierno municipal, del grupo socialista, del Ayuntamiento ni de mí mismo”, zanjó. 

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