Publicada

Todo sigue igual en el casal de Can Carol. El Ayuntamiento de Barcelona ha prorrogado la gestión de este equipamiento de Vallcarca a la Federació d'Entitats Amigues de Can Carol i Consolat (FEACCC), una polémica entidad del barrio.

El acuerdo, adoptado por el gobierno municipal a principios de diciembre, extiende la responsabilidad del colectivo sobre esta instalación durante 2026. Esta prórroga incluye una subvención municipal de 110.000 euros a favor de la FEACCC, otorgada mediante concesión directa por "razones de interés público".

La decisión del Ejecutivo local descarta, un año más, la posibilidad de adjudicar esta gestión a una empresa cultural, tal y como han reclamado los vecinos al consistorio durante los últimos años.

Casal de Can Carol tras su inauguración AJ BCN

Gestión permanente

La citada federación retiene la gestión de Can Carol desde su inauguración, en 2021. La última prórroga se firmó hace un año, cuando el Ayuntamiento extendió el acuerdo firmado con el colectivo a lo largo de 2025.

El acuerdo también se acompañó, entonces, de una subvención que alcanzó los 110.000 euros para administrar la instalación. Con la presente firma, la entidad sumará 220.000 euros de subvención directa municipal en dos años.

Apoyo a okupas

La gestión de la Federació d'Entitats Amigues de Can Carol i Consolat (FEACCC), formada por el Ateneu Popular de Vallcarca, el Observatori Actiu de Vallcarca, la Associació Ecos-Antic Forn de Vallcarca, la Associació Veïnal de Vallcarca Som Barri y la AFA Montseny, no está exenta de polémica.

Esta entidad ha mostrado, durante los últimos años, su apoyo a diferentes okupaciones que se han producido en Vallcarca. A modo de ejemplo, el colectivo Som Barri apoyó un intento sin éxito de okupación en un edificio de la avenida de Vallcarca, protagonizado por 150 personas.

Casal de Can Carol en Vallcarca METRÓPOLI

Fuentes vecinales han señalado en reiteradas ocasiones a Metrópoli que la FEACCC está formada por "asociaciones okupas muy afines a los comunes”, una condición incompatible con la imparcialidad del equipamiento.

"Evitar desacuerdos vecinales"

Los residentes han remarcado en diferentes ocasiones la voluntad de que la administración de Can Carol dependa de sociedades profesionales. La finalidad es garantizar una actividada alejada de ideologías, en beneficio de todo el barrio.

"Queremos que la gestión se destine a empresas culturales que no tengan ningún vínculo con entidades ni federaciones relacionadas con Vallcarca, para favorecer la neutralidad del proceso y evitar cualquier tipo de desacuerdos vecinales", sentenciaron residentes de Vallcarca a este medio.

Noticias relacionadas