Revuelta fiscal contra Colau en el AMB
El ente supramunicipal tiene problemas para recaudar el tributo metropolitano del IBI
29 septiembre, 2020 00:00Noticias relacionadas
La recaudación del tributo metropolitano del IBI también salpica a Ada Colau, alcaldesa de Barcelona y presidenta del AMB. Según datos oficiales a los que ha tenido acceso Metrópoli Abierta, el ente público supramunicipal solo ha recaudado 94 de los 123 millones de euros previstos en 2019, año en el que el impuesto entró en funcionamiento. Unos meses atrás, el AMB alegó ante la oposición "problemas de gestión del tributo en el Vallès" para justificar su fracaso a la hora de recaudar.
La implantación del tributo se inició el 30 de junio del año pasado, un mes después de las últimas elecciones municipales. Se hizo así debido al miedo que había en las filas de los comunes y los socialistas a que una cuestión que había levantado mucha polvareda en 18 municipios metropolitanos, que se cabrearon con la primera edil barcelonesa por el aumento de un 5% de la tasa, les pasase factura en las urnas.
Metrópoli Abierta ha preguntado por el desglose exacto de los datos de la recaudación de la tasa por municipio en el año pasado y sobre qué pasará ahora con aquellos vecinos que no han pagado. Pero, al cierre de esta edición, este medio no ha obtenido respuesta por parte del AMB.
¿QUÉ ES EL TM O IMM?
El Tributo Metropolitano (TM) o Impuesto Municipal Metropolitano (IMM), antes llamado Tributo de la Movilidad, es un recurso legal de los municipios que forman parte del Área Metropolitana de Barcelona para financiar la prestación de los servicios metropolitanos de transporte público: autobuses, metro y tranvía.
El IMM es un impuesto que se presenta en forma de recargo sobre el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) y grava el valor de los bienes inmuebles de naturaleza urbana o de características especiales. Por lo tanto, se exige en los mismos casos que el impuesto de bienes inmuebles y a los mismos sujetos pasivos.
EN LA SEGUNDA CORONA, TAMBIÉN
Este tributo se merita anualmente, el primer día del período impositivo, que coincide con el año natural (el 1 de enero). Al ser de carácter periódico, el cobro en período voluntario se establece, normalmente, entre el segundo y tercer trimestre del año.
Tal y como informó este medio en diciembre del año pasado, este impuesto es obligatorio para todos los empadronados en los 36 municipios de la primera y la segunda corona metropolitanas que tengan vivienda en esta zona y con viviendas con valor catastral superior a los 45.389,47 euros. Este importe se eleva hasta los 72.033,78 euros en aquellos municipios que hicieron la revisión catastral durante el año 2012.
LOS 18 MUNICIPIOS AFECTADOS
Según el Área Metropolitana, este impuesto está previsto en la ley en forma de un recargo cobre el IBI y sirva para “conseguir un territorio metropolitano más ordenado y vertebrado en materia de espacio público y de infraestructuras necesarias para la articulación de las desigualdades de la metrópoli de Barcelona”. Los 18 municipios de la segunda corona no lo pagaban hasta ahora, puesto que solo se cobraba desde 1992 a los 18 municipios de la primera corona metropolitana, que son los que formaban la Entidad Metropolitana del Transporte (EMT).
La creación de la tarifa plana metropolitana, no obstante, “implica que todos los ciudadanos de la metrópolis tengan el mismo derecho a la movilidad y, por tanto, tengan las mismas obligaciones. Una de estas obligaciones es la contribución económica para financiar los servicios públicos”. El AMB explica también que con el tributo se contribuye “a la gestión y al mantenimiento de espacios naturales como la Sierra de Collserola, los ríos Besòs y Llobregat, los 30 kilómetros de playas metropolitanas y la red de 51 parques metropolitanos”. En materia de movilidad, asegura que hace posible “un transporte público de calidad y una movilidad más sostenible”.
Los municipios afectados son Badia del Vallès, Barberà del Vallès, Begues, Castellbisbal, Cerdanyola, Cervelló, Corbera de Llobregat, Molins de Rei, Pallejà, Palma de Cervelló, El Papiol, Ripollet, Sant Andreu de la Barca, Sant Climent de Llobregat, Sant cugat del Vallès, Sant Vicenç dels Horts, Santa Coloma de Cervelló y Torrelles de Llobregat.
SANT CUGAT, CLAVE
Según las primeras estimaciones, entre todas estas poblaciones han de aportar más de 17,3 millones de euros. El peso más importante corresponde a Sant Cugat, a quien en un principio le habían adjudicado un canon de 6,1 millones de euros, pero que posteriormente quedó reducido a 4,2 millones de euros anuales.
A finales del año pasado, varias plataformas vecinales de estas poblaciones contrarias a esta tasa crearon la Plataforma No Tribut AMB. Su objetivo es protestar contra la aplicación por las bravas del tributo metropolitano. Su premisa es que el nuevo tributo es injusto y abusivo “porque toma como referencia el valor catastral de los inmuebles”.
EL PP RECHAZA LA TASA
El partido que llevó la bandera en contra de este tributo, antes incluso de que se aprobase el tributo en 2018, fue el Partido Popular.
Su portavoz en el AMB por aquel entonces, Alberto Fernández Díaz, sostenía que era un impuesto "injusto e injustificado, que se hace pagar por igual en barrios y municipios que reciben los servicios metropolitanos de forma desigual, más allá de la vinculación del servicio de la movilidad con la propiedad." Esta opinión contra este impuesto la sigue manteniendo el PP en el ente metropolitano , con su actual portavoz, Miguel Jurado.
CS EXIGE LA SUSPENSIÓN DEL COBRO
En una línea parecida, la portavoz de Ciutadans en el Área Metropolitana de Barcelona (AMB), Marilén Barceló, solicitó el pasado mes de mayo la suspensión del cobro del tributo metropolitano y la congelación de impuestos para 2020.
La concejal del partido naranja dijo que también pedirán el retorno de los recibos cobrados del 2019 por un "error en el cálculo que existió", y ha recordado que Cs se opuso desde el primer momento a la tramitación del recargo metropolitano para 2020.