Escabechina de oficinas bancarias en Santa Coloma: sin sucursales en la mitad del municipio
El vecindario de ocho de los 16 barrios colomenses se ve obligado a desplazarse para gestionar sus cuentas
4 noviembre, 2021 00:00Noticias relacionadas
La drástica reducción de oficinas bancarias en los últimos años se hace más que latente en el municipio de Santa Coloma de Gramenet. De los 16 barrios de la ciudad, ocho se han quedado sin oficinas bancarias, es decir, la mitad. Can Franquesa, Oliveras, Guinardera, Can Calvet, Serra de la Marina, Riera Alta, el Raval y Safaretjos se ven ahora obligados a renovarse con la banca digital o morir.
Al problema de la desaparición de las sucursales bancarias se suma también el trato recibido en algunas de las oficinas. Varios vecinos de más de 60 años comentan a Metrópoli que han tenido que pedir ayuda a gente que pasaba por la calle para poder operar en los cajeros automáticos. El motivo es que los trabajadores del banco se negaban a facilitar dicho servicio. Incluso, afirman, les han llegado a decir que "sacar dinero es más fácil que poner una lavadora". Por todo ello, los vecinos llevan a cabo protestas de forma constante contra el cierre de cajeros en Santa Coloma.
EL RAVAL HACE RUIDO
El Raval es uno de los barrios colomenses que más activo se muestra a la hora de denunciar la situación. En diciembre de 2020, hace casi un año, se cerró la única sucursal de La Caixa. La clausura hizo que los vecinos tuvieran que desplazarse a otras oficinas siempre que quisieran gestionar sus cuentas. A raíz de la marcha del banco, la Asociación de Vecinos inició en abril de este año una recogida de firmas. "Nuestra gente necesita una oficina presencial, nos da igual el banco que sea", comenta a Metrópoli el presidente de la Asociación, Salvador Jaraba.
En esta zona, según el último anuario de población publicado por el Ayuntamiento de Santa Coloma, se concentran más de ocho mil vecinos y muchos de ellos traspasan el umbral de los 60. Para mayor indignación, la oficina que este barrio tenía asignada también ha desaparecido. "Ahora tendremos que desplazarnos 500 metros más", comenta Jaraba.
CONCENTRACIONES SEMANALES
La Federación de Asociaciones de Vecinos de Santa Coloma (Favgram) colabora activa y conjuntamente con los vecinos afectados por el cierre de oficinas bancarias. De hecho, cada semana tiene lugar una concentración a modo de protesta. En estas ocasiones, también se denuncia la subida del precio de la luz. Aún así, el principal objetivo de estas movilizaciones semanales es la de conseguir firmas.
"Cada jueves vamos a un barrio distinto para buscar firmas", explica el presidente de la Favgram, Tomás Fernández. "Llevamos un ritmo lento, pero estamos enfadados y queremos demostrar que seguimos vivos". El vecindario ya ha recogido 3.000 firmas y asegura que su objetivo a corto plazo es llegar a las 5.000. "Joan Carles Gallego se ha ofrecido a presentar una resolución a la Generalitat si alcanzamos esa meta", asegura Jaraba. En noviembre de 2020 se anunció la participación de Gallego en las elecciones autonómicas de Cataluña como número dos en la lista de Catalunya en Comú.
LA PANDEMIA HA ACELERADO EL CIERRE DE BANCOS
En septiembre del 2008, el año de la crisis económica, España registró su récord de sucursales con 45.662 sucursales de entidades financiera, según datos del Banco de España. Actualmente, las oficinas se han reducido a la mitad: en marzo de este año quedaban 22.392.
Según un informe de principios de año de la consultora JP Morgan, la banca española cerrará el 70% de esas 22.392 oficinas antes del año 2030, más de 15.000. Lo que significa que la banca digital irá ganando cada vez más terreno, como ya se está demostrando. Cataluña ha sido, en especial, una de las comunidades autónomas peor parada: ha sufrido una caída del 64%. El problema ya no se limita a las zonas rurales, sino que ya alcanza a las grandes urbes. La ciudad de Barcelona, de hecho, ha perdido 1.376 oficinas.
Lo que pasa en Santa Coloma es el reflejo de un problema que se ha instaurado en muchas ciudades del territorio español, con las consecuencias que ello conlleva. Vecinos que tenían el banco cerca de su casa ahora tienen que caminar 30 minutos para ir a una nueva sucursal. Un hecho que agrava la situación de la gente mayor y de las personas con movilidad reducida. Muchas, además, no saben usar la banca online para cobrar la pensión o pagar los recibos.
DRÁSTICAS REDUCCIONES
Caixabank anunció en marzo de este año que, tras la integración de Bankia, pretendía hacer un ERE. Recortaría así su plantilla en 8.291 personas. Es decir, un 18,67% del total de empleados del banco de España.
Seguidamente, el BBVA también anunció este 2021 la reducción de su plantilla de 3.800 empleados y el cierre de 530 oficinas. BBVA argumentó su decisión en "el contexto de profunda transformación para el sector, marcada por una enorme presión competitiva, bajos tipos de interés, la adopción acelerada de los canales digitales por parte de los clientes y la entrada de nuevos actores digitales". El Banco Santander, por su parte, también anunció la salida de más de 3.000 trabajadores de sus oficinas.