Aplazan el desahucio de una nave okupada en Badalona con 150 personas

Un juez de Badalona ha acordado aplazar hasta el próximo 13 de enero el desahucio de la nave ocupada de la calle Progrés, donde viven alrededor de 150 migrantes, inicialmente previsto para este jueves, 2 de diciembre. El juzgado de primera instancia número 1 de Badalona ha estimado el escrito presentado por un exmorador de la nave, propiedad de la Sareb, después de que la defensa de los vecinos pidiera paralizar el desahucio por una duplicidad de procesos.

Se trata de una nave industrial abandonada y ocupada desde hace meses por más de un centenar de personas, en su mayoría inmigrantes de origen subsahariano, muchos de ellos supervivientes de la finca que se incendió en diciembre de 2020 y en la que fallecieron cuatro personas a causa del fuego.

DESAHUCIO

Según Sònia Olivella, abogada del colectivo de personas que vive en la nave, sobre el inmueble penden dos órdenes de desahucio, una que tramita el juzgado de primera instancia número 1 y otra el número 6, por lo que ha instado al juez a frenar las órdenes de desalojo hasta solucionar la situación.

De acuerdo con la letrada, este miércoles han podido saber que esta duplicidad de procedimientos se debe a que en uno figura como dirección el número 164 y, en el otro, el número 166, a pesar de que se trata de la misma finca. Por eso ha avanzado que presentarán "todos los recursos posibles" porque "la situación de vulnerabilidad de estas personas es clarísima".

"BUSCAREMOS OTRO INMUEBLE VACÍO"

En un principio, el desahucio de la nave estaba programado para el pasado julio, pero la defensa logró que el juez lo paralizara al menos hasta que los servicios sociales pudieran elaborar sendos expedientes de vulnerabilidad.

Por su parte, los moradores han asegurado que, si los echan, buscarán otro inmueble vacío en el que instalarse, ya que es su única alternativa, porque la mayoría carecen de documentos para trabajar y ni siquiera pueden acceder a prestaciones sociales por falta de empadronamiento. "Abriremos otra nave. La policía no nos puede decir nada, somos un montón de gente", ha remarcado uno de ellos, quien ha señalado que lo que piden es, al menos, poder pasar los meses más duros del invierno con un techo bajo su cabeza.