La colaboración institucional como una tarea prioritaria, al margen de las diferencias entre partidos y con el objetivo de mejorar la gestión de toda el área metropolitana, para que no pasen cosas similares a la desinversión de Nissan.

Ese es el mensaje que repite de forma constante el vicepresidente del Área Metropolitana de Barcelona (AMB), Antoni Balmon, que ha pedido un trabajo conjunto “y con discreción” con fuerzas políticas distintas. Lo ha hecho junto a Xavier Trias, con la intención de recuperar un horizonte entre “socialistas y conservadores, o entre conservadores y socialistas”. Trias lo ha corrobado, al señalar que fue él y el propio Balmon los que encauzaron el AMB ya con él en la alcaldía de Barcelona, a partir de 2011, después de que la Generalitat decidiera eliminar la Corporación Metropolitana, en 1987, al entender el expresidente Jordi Pujol que podía ser una contrapoder. La entidad supramunicipal se recuperó un año antes, en 2010, con el alcalde Jordi Hereu. Balmon ha insistido en esa colaboración con un objetivo inminente: “No podemos permitir que Seat sea una nueva Nissan”, con la idea de que serán necesarias las ayudas y “el diálogo intenso” para que no se produzcan desinversiones en un periodo muy complicado “de transición energética”.

SUPERAR LOS RECELOS

Balmon ha señalado que uno de los hombres clave será Matías Carnero, presidente del comité de empresa de Seat y que será necesaria una negociación intensa con todos los actores implicados, especialmente con el grupo matriz, Wolkswgen. El vicepresidente del AMB se ha mostrado “preocupado” por los años de transición que se aproximan, con la necesidad de lograr un modelo sólido, y evitando que se reproduzca lo que sucedió con Nissan, una desinversión en la Zona Franca que todavía no se ha podido compensar.

El alcalde de Cornellà de Llobregat y vicepresidente ejecutivo del AMB, Antonio Balmón / LENA PRIETO - METRÓPOLI

Lo que Balmon ha reclamado, en una conferencia en el Palau Macaya, en un acto organizado por Barcelona Tribuna, es que los 36 municipios del AMB deben actuar de forma conjunta, con servicios comunes para mejorar el transporte o la construcción de vivienda pública. A su lado, Xavier Trias, que ha querido presentar a Balmon, como una reivindicación de la colaboración institucional, y, especialmente, entre la vieja CiU y el PSC. “Tenía claro en 2010 que, después de muchos recelos, no se podían hacer más tonterias y que la confianza insitucional era básica, con un partido como el PSC que ha sido y es muy diferente. Con Balmon encontramos esa confianza”, ha señalado Trias, que en 2010 era el alcalde de Barcelona.

¿QUIÉN MANDA EN EL AMB?

Trias, que valora si puede encabezar en 2023 una lista de JxCat a la alcaldía –por ahora ha mostrado su rechazo, pero recibe peticiones en ese sentido—ha insistido en que Barcelona debe liderar esa área metropolitana, siempre para “hacer posible lo que es posible, no defendiendo lo que cada partido político considera como su sueño imposible”.

Balmon ha hablado de la zona de bajas emisiones y de la ampliación del aeropuerto o de la lucha a favor de la sostenibilidad, sin llegar a ir “en contra de nadie”, en relación al coche, y en referencia al proyecto de la alcaldesa Ada Colau, que sí ha mostrado su rechazo al vehículo privado.

En ese sentido, y preguntado por el mando en el AMB, donde Colau es la presidenta, Balmon ha sentenciado. ¿Quién manda con el AMB? “El consenso”.

Noticias relacionadas