Manuel López acampa frente al Ayuntamiento de Santa Coloma de Gramenet desde hace días. El hombre, de 55 años, ha iniciado una huelga de hambre para exigir una "vivienda digna". Dice que tiene un 66% de discapacidad, motivo por el que está postrado en una silla de ruedas.
La reivindicación de Manuel nace en el 2020, según ha publicado en Twitter una cuenta de apoyo creada recientemente, cuando el Ayuntamiento, dicen, le impide la entrada a su propia casa. Un local ubicado en la plaza de la Vila, 12, de donde la Policía Local desalojó a unos okupas, entre ellos Manuel, hace una semana.
La manifestación contra el desalojo de los okupas / ANDREU FERNÁNDEZ
"PROPIETARIO" DEL NÚMERO 12
Manuel asegura que él es el propietario del local de la plaza de la Vila, que en su día fue una conocida joyería de la zona. "En 2020, tras ser víctima de un montaje policial, el Ayuntamiento aprovechó, estratégicamente, para interponer una demanda reclamando que el local estaba afectado por el Plan Especial de Reforma Interior (PERI) e impedir la entrada a su casa, a pesar de constar como legítimo propietario". Una versión que choca frontalmente con la del consistorio, que la desmiente: afirman que su nombre no figura en el registro de la propiedad.
¿SIN SOLUCIÓN HABITACIONAL?
Otra de las reivindicaciones que el grupo CSO Kasa Estudi 9 ha expresado a través de Twitter es que los Servicios Sociales del Ayuntamiento "son conocedores de su situación desde el 25 de diciembre y le han negado una solución habitacional".
Sin embargo, el equipo de Núria Parlon explica a Metrópoli que a Manuel se le ha ofrecido en más de una ocasión la posiblidad de acudir a algún albergue de la ciudad mientras su situación se regula. Una opción que él ha rechazado tajantemente.
ENVUELTO EN UN HOMICIDIO
Los okupas desalojados han expresado su indignación estos días sobre los movimientos de los agentes de la Policía Local que, aseguran, pretenden "intimidar" a Manuel, que está plantado desde el 16 de enero a las puertas del consistorio con una tienda de campaña y un colchón para dormir.
Con todo, Manuel no es un desconocido para la policía. El hombre protagonizó hace ahora tres años un violento episodio en el centro de Santa Coloma que terminó con un muerto por arma blanca.
El edificio okupado de la plaza de la Vila de Santa Coloma / METRÓPOLI
PELEA
Según han explicado vecinos de la zona que recuerdan la escena a la perfección, Manuel y su hermano se pelearon con un tercero el 2 de julio de 2020. Todos los implicados en la mortal riña okupaban en aquel entonces la misma casa que, actualmente, es motivo de polémica entre el colectivo y la alcaldesa.
El desenlace de la disputa fue el peor: un hombre murió por una puñalada. Manuel fue uno de los tres arrestados, en aquel momento tenía 53 años, por los Mossos d'Esquadra. Con todo, quedó en libertad al no demostrarse que él hubiese sido el portador del arma homicida.
"ESE HOMBRE CAMINA"
El afectado por el desalojo acostumbra a desplazarse en su silla de ruedas, como ha podido comprobar in situ este medio. Sin embargo, fuentes policiales afirman que se trata de un montaje: "Ese hombre camina".
Las mismas fuentes aseguran haberlo visto "caminar con la silla al hombro para subir las escaleras". Podría tratarse de una situación excepcional que obligue a Manuel a levantarse de su silla, pero los vecinos que presenciaron la rave que los okupas montaron en plena calle hace pocos días refuerzan la versión: "Lo vimos bailar perfectamente".