Dos agentes de los Mossos d'Esquadra han resultado heridos mientras intentaban detener a un presunto agresor machista que, a la puerta de un colegio de Cerdanyola del Vallès dijo que pegaba a su mujer y que lo seguiría haciendo, según ha asegurado el portavoz del sindicato FEPOL, Toni Castejón.
El líder sindical lo ha explicado en un hilo de Twitter, donde ha relatado el altercado entre este presunto agresor y dos agentes de la policía catalana. Según Castejón, los hechos pasaron el viernes a la salida del colegio Anunciata de Cerdanyola, cuando un agente que no estaba de servicio avisó de que un hombre estaba nervioso y en una actitud hostil hacia su mujer: "La he pegado y lo haré cuando quiera", es la frase que dijo el presunto autor de los hechos.
LA MADRE DEL AGRESOR
Al poco rato aparecieron dos policías de seguridad ciudadana, que trataron de calmar al hombre al tiempo que lo identificaban. En aquel momento apareció la madre del hombre e increpó y se abalanzó sobre el agente de paisano que había alertado del comportamiento machista de su hijo.
Los dos agentes uniformados trataron de frenar el avance de la mujer hacia su compañero y en aquel momento el hombre y un menor empezaron a pegar a ambos agentes. "A uno le dieron golpes, patadas en las costillas y en la cabeza, mientras el otro recibió, por parte del menor, un puñetazo en el pómulo y en el labio", explica Castejón en Twitter.
YA ESTÁN EN LIBERTAD
La situación terminó con la llegada de refuerzos policiales que redujeron y detuvieron al hombre y al menor de edad. Uno de los agentes sufrió una fractura de radio a causa de los golpes mientras los puñetazos que recibió el otro supondrán, según los tweets del portavoz sindical, "como mínimo tres semanas de baja".
El hombre identificado y el menor pasaron a disposición policial y fueron puestos en libertad a lo largo del fin de semana, según la versión del representante de FEPOL.