Los sindicatos pactan con Roca las condiciones del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afectará, en principio, a 168 empleados de la fábrica de Gavà y Viladecans. Tras algo menos de un mes de negociaciones, representantes de los trabajadores y de la empresa han firmado un preacuerdo que, sin embargo, todavía tendrá que ser ratificado por la plantilla, compuesta por 700 empleados.
DETALLES DEL ACUERDO
La empresa y los sindicatos han acordado un plan de rentas para los trabajadores mayores a los 53 años que implica el 90% del salario neto con una revalorización anual del 1,5%. La adscripción al ERE será absolutamente voluntaria y, si la compañía no llegara a los 168 trabajadores, se abrirá una oferta para los empleados menores de 53. Estos podrían pactar su salida con una indemnización equivalente a 42 días por año trabajado con un tope de 32 mensualidades.
Además, se ha acordado que, si en los próximos 4 años, la empresa realizara otro ERE, estas serían las condiciones mínimas de las que partiría esa negociación. Por otra parte, CGT ha avisado que no suscribirá este acuerdo, pues la destrucción de empleo va contra los principios del propio sindicato. El próximo 10 de octubre se llevará a cabo el referéndum por el preacuerdo alcanzado entre los representantes de ambas partes
Interior de las instalaciones de Roca en Gavà / ROCA SA
La planta, sin embargo, seguirá en funcionamiento. Se trata de la primera fábrica que levantó la compañía y todavía es el buque insignia de Roca Group, pues lleva desde 1917 en funcionamiento. Roca justificó el recorte de plantilla "por el paulatino descenso de las ventas en los últimos años", así como "por la previsión negativa del mercado en el conjunto de la Eurozona".
ESPAI ROCA
Preguntados por este digital, desde la compañía aseguraron que "Roca Gavà-Viladecans seguirá funcionando con regularidad a nivel industrial y seguirá siendo centro de referencia a nivel global, a la cabeza de la innovación tecnológica y sostenibilidad en productos para el baño".
Fuentes sindicales, aunque coinciden con que no supondrá el fin de la actividad industrial, sí apuntan a que el espacio ganado pasará a integrar el Espai Roca, un proyecto urbanístico acordado entre la empresa y los ayuntamientos de Gavà y Viladecans en 2014 para levantar las nuevas oficinas centrales del grupo, así como las instalaciones de innovación, investigación y desarrollo. Además, este espacio permitirá la construcción de un parque residencial de unas 400 viviendas, 200 de las cuales serán de compraventa o alquiler social, así como la creación de nuevas zonas verdes.