La borrasca Aline que este fin de semana azotó la provincia de Barcelona, tuvo devastadoras consecuencias para los municipios del litoral metropolitano. La playa de Castelldefels quedó irreconocible tras este fenómeno, que trajo lluvias intensas, fuerte viento --que superó los 90 kilómetros por hora-- y fenómenos costeros peligrosos.
Todos estos factores pusieron en alerta a los municipios de la costa, en aviso por fuerte oleaje de más de cuatro metros de altura.
LA PLAYA DE CASTELLDEFELS, EN IMÁGENES
Las imágenes de la playa de Castelldefels destrozada se han viralizado en las redes sociales, conmocionando a sus residentes, que piden soluciones urgentes para la costa metropolitana ante el azote de los temporales.