Molins de Rei está a punto de dar el pistoletazo de salida a uno de los eventos más importantes de la comarca del Baix Llobregat: la Fira de la Candelera. Con más de 170 años de historia, este encuentro es para el municipio (de 27.000 habitantes) una oportunidad de proyección más allá del territorio metropolitano, así como un importante motor económico. La feria –que se celebra los días 2,3 y 4 de febrero– recibirá a más de 300.000 visitantes, según apuntan fuentes municipales a Metrópoli.
MOTOR ECONÓMICO
El Ayuntamiento de Molins lo tiene todo listo para que de comienzo, este viernes 2 de febrero, la Candelera. Para ello, hace una aportación municipal de 250.000 euros que, al finalizar la feria, se transforma en un impacto económico de 7,5 millones de euros, según el consistorio. Lo que quiere decir que por cada euro que aporta el Ayuntamiento retornan 30 a la economía local.
De esta manera, se posiciona como una de las ferias más rentables de las que se organizan en el área metropolitana. “En términos económicos, es el fin de semana más importante del año para Molins”, asegura su alcalde, Xavi Paz. “Es nuestro gran escaparate”, señala a este medio.
DISPOSITIVO DE SEGURIDAD
Para garantizar la seguridad y evitar los actos vandálicos que tuvieron lugar durante la fiesta mayor del municipio a finales de septiembre del año pasado, Molins de Rei contará con un dispositivo policial especial. Los Mossos d’Esquadra y la Guardia Urbana trabajarán de forma conjunta, poniendo el foco de atención en la noche. Para ello se ha activado toda la plantilla de la Urbana –formada por 35 agentes– y se ha reforzado el patrullaje de los Mossos entre las 22:00 y las 07:00 horas de la mañana.
También desempeña un papel importante la empresa privada de seguridad que contrata la Candelera, en manos de Wakeful Group, con sede en Mataró desde 2012. Desde el gobierno municipal esperan que la Candelera se desarrolle sin ningún tipo de incidente, teniendo en cuenta un importante hecho diferenciador con la fiesta mayor: no se ha organizado ninguna actividad nocturna. “Son dos eventos completamente diferentes”, apunta Paz.
Por otro lado, se han habilitado dos puntos lilas: uno situado en la Feria de Vinos –que celebra este año su 44.ª edición–, y otro en el espacio dedicado a las atracciones. También se ha reforzado el servicio de transporte público, aumentando la oferta de trenes de Renfe y poniendo al servicio de los visitantes un autobús lanzadera gratuito para conectar el polígono, donde se ha habilitado un aparcamiento gratis, con el centro de la ciudad.
HASTA 700 EXPOSITORES
La Candelera es una de las ferias más antiguas de Catalunya. Este año se celebra la 173.ª edición, con más de 50.000 metros cuadrados de expositores, todos concentrados en el núcleo urbano de Molins de Rei. Una ubicación clave para el comercio local y la restauración, que bate récords de facturación año tras año.
En 2002 fue declarada Fiesta Tradicional de Interés Nacional por la Generalitat. “Es la feria de las ferias”, señala Paz. Esta celebración no solo destaca por su historia, sino también porque pone en valor los orígenes del municipio, tal como detalla su alcalde. Hasta el domingo 4 de febrero, las calles del centro acogerán más de 650 paradas, entre puestos artesanales, de gastronomía, tecnológicos o culturales.