La oposición carga contra una alarmante subida de impuestos en Viladecans

La oposición carga contra una "alarmante" subida de impuestos en Viladecans Ayuntamiento Viladecans

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La oposición carga contra una "alarmante" subida de impuestos en Viladecans

Esquerra Republicana de Catalunya ha denunciado que se trata de un incremento por "la puerta de atrás" tras el anuncio de la bajada del IBI por parte del Ayuntamiento

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Viladecans ya tiene las nuevas ordenanzas fiscales para el próximo 2025. El pleno celebrado este jueves, 19 de diciembre, ha dado luz verde a los nuevos tributos municipales con el apoyo de los dos grupos políticos de gobierno: PSC y Comuns.

En cambio, la oposición ha rechazado de forma unánime las nuevas ordenanzas, que han tildado de un "incremento alarmante y sin precedentes". En total, 11 ediles han votado en contra: Esquerra Republicana de Catalunya (5), PP (3) y VOX (3).

Aunque desde el primer momento contó con su voto desfavorable, la aprobación no ha corrido peligro en ningún momento, ya que el pacto entre morados y socialistas ha permitido sacarlas adelante con sus 13 ediles. 

Olga Morales, nueva alcaldesa de Viladecans

Olga Morales, nueva alcaldesa de Viladecans Aj Viladecans

Rebaja del IBI y nueva tasa

Las principales modificaciones incluyen una rebaja del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) y la creación obligatoria de la nueva tasa de residuos, que ha sido el centro de todas las críticas. 

Si bien el consistorio anunció una bajada del 4,5% del IBI tras la polémica subida del año anterior, Esquerra Republicana de Catalunya lo ha considerado como "un incremento notable por la puerta de atrás". 

De hecho, los republicanos, liderados por Bàrbara Lligadas, han calculado que pese al descenso del tributo inmobiliario, la nueva tasa de basuras implica una subida media generalizada del 19% para los ciudadanos y del 220% en el caso de los comercios.

La polémica de 2023

El pasado 2023, la aprobación de las ordenanzas fiscales ya generó polémica en Viladecans. El consistorio, liderado por aquel entonces por Carles Ruiz, aplicó una subida del 10% de los tributos municipales, lo que levantó los ánimos entre muchos residentes. 

De hecho, seis asociaciones vecinales y varias decenas de ciudadanos se unieron para protestar contra la medida, que como en muchos municipios metropolitanos, acabó saliendo adelante.