Condenan al Colegio Goar de Viladecans por no frenar el acoso escolar a un menor
Condenan al Colegio Goar de Viladecans por no frenar el acoso escolar a un menor durante cinco años
El antiguo alumno llegó al centro educativo con 7 años y sufrió insultos, vejaciones y hasta agresiones físicas de forma continuada, sin que el centro aplicara medidas para frenarlo
Condena judicial al Colegio Goar de Viladecans por no actuar en un caso de acoso escolar continuado a un menor de 7 años. Un juzgado ha declarado culpable al centro educativo por no haber tomado medidas para frenar los comportamientos abusivos que sufrió un alumno durante cinco años seguidos.
El menor, que actualmente tiene 15 años, llegó a medio curso al centro educativo del Baix Llobregat en 2016, cuando tenía siete años de edad procedente de Brasil. "Pasó de un estado emocional de felicidad y de que todo funcionaba bien a estar solo", ha asegurado Jose Manuel Mayans, padre de la víctima, en una entrevista a TVE.
El progenitor ha denunciado los insultos y vejaciones de todo tipo que sufrió su hijo durante los años que duró el acoso. "Sufría insultos de gordo y sudaca", ha afirmado Mayans.
Edificio del colegio Goar de Viladecans
Agresiones físicas
El menor no solo sufrió insultos y comentarios despectivos, sino que los ataques fueron mucho más allá, con agresiones físicas. "Le pisaron el pie y le rompieron los cuatro dedos del empeine", asegura el progenitor.
El padre ha asegurado que acudió al colegio para hablar con el director del centro educativo tras la presunta agresión que sufrió su hijo por parte de otros compañeros.
Lejos de actuar ante la situación de acoso, Mayans ha asegurado que el director le dijo que no había ningún comportamiento violento contra su hijo. De hecho, según ha relatado el progenitor, el director le dijo que las heridas se debían a "una torcedura".
Indemnización
En el escrito final, el juez sentencia que "el centro escolar no actuó con la diligencia debida y exigible para evitar la situación de acoso vivido por el menor", por lo que les ha condenado pagar una indemnización económica a la familia por el daño ocasionado al menor.
