Montaje de Enrique Tomás durante una entrevista con Metrópoli y un plato de jamón

Montaje de Enrique Tomás durante una entrevista con Metrópoli y un plato de jamón Archivo

Gran Barcelona

El empresario de Badalona que triunfó en el resto del mundo: "Es el mejor producto porque le gusta a todos"

La ciudad metropolitana ha sido cuna de grandes talentos, y entre ellos destaca el dueño de la empresa Enrique Tomás, que ha llevado su marca de jamones a lo más alto del mercado internacional

Adiós a la comida tradicional catalana, esta es la nueva obsesión de Rosalía: "Es mi plato predilecto con diferencia"

Leer en Catalán
Publicada
Actualizada

Noticias relacionadas

Situada a orillas del Mediterráneo y con más de 2.000 años de historia, Badalona es mucho más que una ciudad vecina de Barcelona. De sus calles han salido personalidades destacadas en el ámbito deportivo, cultural y empresarial.

También es una localidad con una fuerte tradición obrera, espíritu emprendedor y un carácter mediterráneo que se respira en cada rincón.

En este entorno de esfuerzo y superación personal ha surgido una de las figuras más representativas del emprendimiento gastronómico en España: Enrique Tomás, fundador de la empresa homónima especializada en jamones ibéricos. Su marca, Enrique Tomás, es hoy sinónimo de calidad, expansión global y pasión por el producto más icónico de la gastronomía española: el jamón.

"El mejor producto"

Enrique Tomás, nacido en Badalona en 1966, ha pasado de una infancia marcada por la precariedad a convertirse en una de las figuras más reconocidas del sector alimentario español. Su nombre va inevitablemente ligado al jamón, pero su historia es también la de una superación personal y profesional que ha roto fronteras.

Enrique Tomás durante la entrevista con Metrópoli / LUIS MIGUEL AÑÓN - METRÓPOLI

Enrique Tomás durante la entrevista con Metrópoli / LUIS MIGUEL AÑÓN - METRÓPOLI

“El jamón es el mejor producto alimentario del mundo porque le gusta absolutamente a todo el mundo”, afirma en una entrevista en la Cadena SER, convencido el empresario, que ha sabido convertir una pasión en un imperio global.

De Badalona al mundo: la historia de un luchador

Criado en el barrio de la Salut, Tomás fue el menor de once hermanos. Esta realidad familiar marcó profundamente su infancia. “A nadie le preocupaba demasiado si iba al colegio o si había comido”, recuerda.

Pese a las dificultades, nunca guarda reproches hacia su madre, aunque admite que la situación no era fácil: “Le decía a mi madre que, si había un concurso de madres, que no se presentara”. Una frase que repite con ternura, reflejando una infancia dura pero también cargada de cariño y resiliencia.

Punto de venta de la compañía jamonera Enrique Tomás / CG

Punto de venta de la compañía jamonera Enrique Tomás / CG

Desde muy joven, Enrique entendió que el jamón no era simplemente un alimento, sino una experiencia sensorial y emocional. Ese enfoque distinto le permitió dar un valor añadido a su producto, que hoy en día se vende en distintos países del mundo. Su apuesta por una marca fuerte, una experiencia de cliente única y la internacionalización del jamón ibérico lo han posicionado como referente.

Una visión diferente del éxito

A pesar de su proyección internacional y su éxito empresarial, Enrique Tomás mantiene una visión muy personal sobre la riqueza. “Ser rico es una sensación, y cuando tienes la sensación de que tienes todo lo que necesitas, ya eres rico”, asegura.

En su caso, la clave ha sido siempre el optimismo: “Para ser empresario es vital ser optimista”, declara. Esa actitud positiva es la que lo ha acompañado desde sus inicios, cuando decidió apostar por una visión innovadora del negocio del jamón.

Un camarero preparando una tapa de jamón ibérico

Un camarero preparando una tapa de jamón ibérico HASTA LOS ANDARES

Amistades auténticas y pasiones compartidas

Enrique Tomás no solo destaca por su carrera empresarial. También es conocido por su cercanía con el grupo Estopa, con quienes mantiene una relación muy estrecha desde hace años. “La relación que tengo con David y José viene desde el principio. He vivido cosas maravillosas con ellos”, explica.

Se define como “el tercer Muñoz” y encuentra en David Estopa un alma gemela en una de sus grandes pasiones: la vida de Jesús. “David y yo nos podemos pasar una noche entera hablando de historias sobre Jesús”, confiesa.

Un jamón para todos

El secreto de su éxito radica en una visión clara y sin pretensiones: ofrecer un producto que guste a todo el mundo. “El jamón es el mejor producto porque le gusta a todos”, insiste. Esa filosofía ha guiado su expansión y le ha permitido llevar un producto profundamente arraigado en la cultura española a clientes de todo el planeta.

Enrique Tomás ha exportado una parte esencial de la cultura gastronómica española con una mirada moderna y accesible. Desde los barrios humildes de Badalona hasta las grandes capitales del mundo, su historia es la prueba de que la pasión, el trabajo y una idea clara pueden romper cualquier barrera.