Un vigilante de Wakeful Seguretat en una imagen de archivo
El Ayuntamiento de Premià excluye a la polémica Wakeful de su concurso por la seguridad privada
La empresa, conocida por los problemas que causa en el cumplimiento de sus licitaciones, pierde 190.000 euros por intentar subcontratar a una tercera entidad, incumpliendo así el pliego
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Nuevo palo a Wakeful. Si la empresa con sede en Mataró recibió un bálsamo en forma de prolongación del contrato de seguridad en diversos espacios por La Mercè, ahora queda excluida de un jugoso contrato para la gestión de la seguridad en Premià de Mar.
Se trata de la licitación para la gestión de los servicios de seguridad, control de accesos y servicios auxiliares para eventos organizados por el mismo ayuntamiento de Premià de Mar durante 2025.
El monto total por la licitación asciende hasta los 189.139,15 euros. Al concurso se han presentado cuatro empresas, siendo una de ellas la capitaneada por Alberto Torrejón, conocida en el sector por su cuestionable reputación.
Incumple el pliego
Sin embargo, y antes de que el municipio tome la decisión final, se ha publicado un acta a fecha del 25 de septiembre, en el que se decide "excluir a la empresa Wakeful Seguretat ya que, de conformidad con la cláusula 39 del pliego, no se admite la subcontratación de ningún servicio", se detalla en el informe.
Personal de seguridad de Wakeful
"En el Documento Europeo Único de Contratación (DEUC) presentado por la empresa se señala de forma inequívoca que la compañía tenía la intención de subcontratar e indica cuál será la empresa subcontratada", añade.
Una estrategia fallida
"A efecto de la mesa de contratación, esta declaración se considera un incumplimiento del pliego de cláusulas, que se califica como lex contractus vinculante tanto para el licitador como para la Administración", concluye el texto.
En otros términos, la empresa Wakeful Seguretat pretendía subcontratar servicios para cubrir todas las demandas del municipio. El grupo, inicialmente, se dividía en dos ramas: la de seguridad (Wakeful Seguretat) y la de servicios auxiliares (Wakeful Services), esta última recientemente en concurso de acreedores.
Un historial plagado de sombras
La empresa, una contratista habitual en las adjudicaciones públicas de ayuntamientos catalanes, acumula un legado cuando menos cuestionable. Trabajadores relatan jornadas maratonianas, mientras que varios consistorios también se han visto arrastrados por los desmanes de la compañía capitaneada por Alberto Torrejón.
Auxiliar de Wakeful Seguridad en una imagen de archivo
En este sentido, el grupo ha dejado servicios descubiertos, como el de la Cabalgata de Reyes, además de altas irregulares en la Seguridad Social, impagos y retrasos de nóminas. Incluso la Oficina Antifraude de Catalunya investigó a Wakeful por una presunta deuda de 1,3 millones de euros.
Stride Services, la otra cara del grupo
El legado también salpica a Stride Services, una empresa que, a pesar de los intentos por desvincularse de la nave nodriza, ha sido reconocida como integrante del grupo por Inspección del Trabajo.
