Badalona habilita el tanatorio a las mascotas para que se despidan de sus dueños

Badalona se alza como ciudad pionera en un servicio. El tanatorio del municipio ha abierto las puertas de sus instalaciones a las mascotas, para que puedan despedirse de sus dueños. 

Hasta once animales, mayoritariamente perros y gatos, se han despedido en las últimas semanas de sus propietarios en el velatorio. 

"El duelo de la mascota, cuando no puede hacer esta acción, es mucho más largo, porque lo que hace es esperar a su compañero de viaje", relata el director financiero de Pompas Fúnebres --empresa coordinadora del servicio--, Joan Oller. 

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"Desorientación" en los animales

Si bien los animales tienen un "espíritu de supervivencia" que les ayuda a buscar otro referente en la familia, los primeros momentos sin su propietario y sin un espacio de despedida provocan "desorientación" en ellos.

"Poderse despedir de él, ver a la familia triste, hace que el perro, al final, pueda entender que ha pasado algo extraordinario", apunta Oller.

Asimismo, este servicio está disponible a quien lo requiera en todos los tanatorios que gestiona la empresa Pompas Fúnebres.

"Interactividad" con el difunto 

El directivo de la compañía, cuyos servicios abarcan varios municipios del área metropolitana de Barcelona, asegura que las mascotas "interactúan de alguna forma" con la persona que ha fallecido.

"Tienen un rato en el que se relacionan con el difunto a su manera, algunas lo hacen más intensamente, otras menos: todas olfatean, algunas lamen", hasta que "llega un momento en el que el animal considera que ya se ha despedido", comenta. 

Perros en una imagen de archivo RRSS

Así, la mascota puede cerrar el círculo y buscar un "nuevo referente", donde pueda sentirse "segura" dentro del núcleo familiar. 

"Es un momento de paz, de terminar de una forma muy humana el viaje de la persona que ha muerto y dar paso a una nueva realidad", concluye. 

Una acogida "bestial"

En este sentido, Oller afirma que la iniciativa, que esporádicamente ya se había ofrecido en los tanatorios de la compañía, ha tenido una acogida "bestial".

"La verdad es que creo que somos pioneros", comenta, y recuerda que PFB quiere abrir a finales de 2026 un tanatorio específico para despedir a las mascotas.

El directivo aclara que este proyecto, "con una cierta envergadura" y que conlleva unas "implicaciones administrativas importantes", no se quiere "mezclar" con el velatorio para personas.

Esto, sumado a la falta de espacio en el recinto de Can Ruti, ha empujado a la empresa a buscar una nueva localización -aún por definir- para las nuevas instalaciones, que podría ser fuera de la ciudad de Badalona