Shakira y Piqué han llegado a un acuerdo acerca de la custodia de sus hijos. Se trata del principal escollo de su separación que la ya expareja ha tenido que solucionar después de que se hiciera efectiva su separación. 

El conflicto se ha solucionado después de que el futbolista Gerard Piqué renunciara a la custodia y, según el acuerdo firmado con la cantante colombiana, le otorgara la potestad de sus hijos, Milan y Sasha, así como que se mudaran a Miami, donde la cantante tiene amigos, familia, y nada menos que una mansión valorada en 16 millones de dólares.

A cambio, el jugador del F.C Barcelona, podrá visitar a sus hijos cuando quiera. En principio, la idea es que les vea unos 10 días al mes. Piqué se quedará con la casa de Esplugues, donde seguirá viviendo. A esta casa se mudará presumiblemente su actual pareja, Clara Chía. Los gastos de los viajes de Barcelona a Miami serán compartidos entre el ya roto matrimonio.

UNA GRAN MANSIÓN

Este será su nuevo lugar de residencia, al que se mudarán el próximo año. Se trata de una casa de 900 metros cuadrados ubicada en North Bay Road Drive. Tiene seis habitaciones y siete baños, gimnasio, piscina exterior, sala de juegos, área de spa y un muelle privado que da a la bahía de Biscayne.

Shakira y Piqué a su llegada al despacho de abogados en Barcelona / EUROPA PRESS

La cantante adquirió la mansión en 2001. En 2003 la intentó alquilar por 45.000 dólares mensuales y en varias ocasiones la habría también intentado vender. En 2018, de ello, pedía 12 millones por ella.

VECINOS DE ALTO STANDING

Esta es la casa en la que la cantante colombiana vivió con su expareja, el abogado argentino Antonio de la Rúa. La clase y el alto standing no solo se respira en sus instalaciones, sino también fuera. Y es que algunos de los vecinos de la familia son los cantantes Ricky Martin o Jennifer López.

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