El Ayuntamiento da luz verde a la regulación de las habitaciones turísticas

El Ayuntamiento de Barcelona ha dado luz verde a la preparación de una ordenanza municipal con la que se quiere regular las habitaciones turísticas. La propuesta presentada este viernes por Ciutadans ha contado con el apoyo del partido de gobierno, Barcelona en Comú, así como los rebautizados Grupo Municipal Demócrata (ex CiU), PSC y PP. Por su parte, ERC se ha abstenido y la CUP ha votado en contra.

El grupo liderado por Carina Mejías ha instado al consistorio a presentar una ordenanza municipal en un periodo de 6 meses que en primer lugar deje clara la diferencia entre las viviendas de uso turístico y el alquiler de habitaciones. El segundo lugar, se buscará consensuar pautas de comportamientos aceptadas. Para ello, se regularán los horarios, la ocupación máxima y las normas de comportamiento de los inquilinos.

En tercer lugar, la ordenanza municipal contemplará responsabilizar al operador urbanístico o al arrendatario del incumplimiento de las normas y se delimitarían los protocolos de actuación municipal y las sanciones. Por último, la propuesta legislativa estudiará la posibilidad legal de establecer una fianza para las viviendas de uso turístico así como una tasa o impuesto en el alquiler colaborativo.

REACCIONES MUNICIPALES

En este sentido, el concejal de GMDemocràtica Jordi Martí ha animado al consistorio a “dialogar y consensuar con todos los partidos políticos y actores del sector” el futuro texto.

Por su parte, Xavier Mulleras del grupo municipal del PP ha pedido reclamar a la Generalitat que se traspasen “las competencias para poder regular cada una de las consecuencias que tiene en el turismo de Barcelona”. Si el gobierno de Ada Colau no consigue esta transferencia, el acta municipal quedará en “papel mojado” como ha apuntado Mulleras.

Jordi Coronas, de ERC, ha explicado la abstención de su partido por considerar que “los términos en los que se plantea se quedan cortos en muchos aspectos” y por las redundancias con la actual ley de turismo. Por ello, ha instado al gobierno local a ser “más ambiciosos”.

El partido de la CUP ha mostrado su rechazo en boca de la concejal de María Rovira quien ha considerado que este tipo de proposiciones sirven para “dinamitar regulaciones que consideran restrictivas” y ha puntualizado que de esta forma se quiere “mercantilizar un derecho como es el de la vivienda”.