El republicano Alfred Bosch se convertirá este viernes en el primer precandidato a la alcaldía de Barcelona, ya que se acaba el plazo en las filas de ERC para presentar candidaturas. Y, hasta el momento, nadie se ha postulado para disputarle la plaza al historiador, porque nadie ha presentado los 140 avales necesarios para optar a la plaza. Con esta decisión, Bosch aleja también los rumores de su incrustación en un hipotético Gobierno de la Generalitat.

“Alfred ha estado cuatro años preparándose para ser alcalde de Barcelona y ahora es el momento en que lo intenta, ya que estamos en la mejor coyuntura posible”, afirman a Metrópoli Abierta fuentes de ERC. Además, apuntala su posición en el Ayuntamiento frente a algunos que le prefieren fuera de él y por eso le envían al nuevo Gobierno que se pueda formar próximamente. “No tiene intención de ser consejero ni ha hablado del tema con nadie. Su futuro está enfocado sólo a las municipales”, subrayan las fuentes consultadas.

El nombre de Alfred Bosch se barajó en los últimos días en determinados círculos políticos como uno de los representantes de ERC en el nuevo Gobierno de la Generalitat que se ha de formar en las próximas semanas. De hecho, según algunas fuentes, el nombre de Bosch salió a la palestra por “la lectura distorsionada de algunas de sus apariciones públicas”.

En esas apariciones, Bosch hablaba de los temas de política catalana y de ahí hubo quien infirió que estaba preparando el camino para dar el salto a la Generalitat. “Todo falso. Es cierto que atendió a muchos medios de comunicación extranjeros, pero porque él habla idiomas: domina a la perfección, además del castellano y el catalán, el francés, el inglés, el italiano y se defiende en alemán. Pero no había ninguna otra intención. De momento, él está muy bien en el Ayuntamiento y su intención es seguir aquí e intentar conquistar la alcaldía”, dice una persona de su confianza.

A 20.000 VOTOS DE LA VICTORIA

Desde las filas de Esquerra se considera que las elecciones municipales de 2019 son las primeras que puede ganar una fuerza netamente independentista la alcaldía de la capital catalana, ya que consideran que el primer mandato de Xavier Trias al frente de Convergència “no era con un programa soberanista, sino autonomista, además que iba en coalición con Unió Democràtica”.

Alfred Bosch durante un pleno del Ajuntament de Barcelona / ÁLVARO VENTURA



Ahora, sin embargo, aseguran que “el último barómetro nos favorecía espectacularmente, ya que en las encuestas Alfred Bosch superaba a Ada Colau. Los sondeos nos dicen que somos el partido que tenemos más opciones y, haciendo una extrapolación de datos, queda patente que con 20.000 votos más podemos ganar las elecciones. Las lecturas más optimistas también vaticinan que podemos obtener la alcaldía, ya que en la intención directa de voto somos los primeros, pasando por primera vez por delante de Barcelona en Comú, que es el partido que gobierna en la actualidad”.

ULTIMAR EL CAMBIO

Lo que tienen claro desde las filas de Esquerra es que “en las elecciones del 2015 se vio que había una voluntad de cambio”, según explica otra fuente a este diario. Y “lo que hemos de hacer es materializar esa voluntad de cambio el año que viene”. Para eso, ERC espera dejar constancia de que el actual equipo de gobierno “ha sido un desastre y se ha visto desbordado por la realidad. Lo que hace falta es alguien que acabe materializando ese cambio que no ha llegado a producirse”. Y subrayan que el instrumento de ese cambio podría ser ERC, que es el partido mejor tratado en las encuestas.

Bosch pretende hacer una lista “lo más amplia posible, pero que hable, sobre todo, de Barcelona”. En ERC se considera que su líder local es un independentista “de hace años” y que “ya lleva muchos años en la política como para que la gente sepa qué piensa, porque por algo fue portavoz de Esquerra en el Congreso de los Diputados antes de venir a Barcelona. Por tanto, podemos decir que ya tiene una acreditada experiencia en el sector y ahora la ejercerá vinculándola a la ciudad”.

BARCELONA EN LA CABEZA

Durante la última legislatura municipal, además, ha completado su conocimiento sobre los temas locales. “Es verdad que, viniendo de una etapa de Madrid, en el Congreso, parecía que las cuestiones locales le podían quedar lejanas, ya que no conocía el ritmo de la política municipal. Pero ha quedado demostrado con su trayectoria que enseguida se puso al día”. Los suyos afirman que “Alfred no es un recién llegado y tiene Barcelona en la cabeza”.

Su intención es combinar los aspectos nacionales con los sociales para aplicar una estrategia de partido en el consistorio barcelonés. En otras palabras: adoptar una hoja de ruta soberanista pero sin olvidar los temas cruciales que puedan fortalecer la cohesión de la sociedad barcelonesa.

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