Unos 1.000 funcionarios del Ayuntamiento de Barcelona, entre ellos unos 200 bomberos, se han manifestado este viernes por la mañana "por un convenio justo". La protesta contra el gobierno de Ada Colau está organizada por CCOO, UGT y el Sindicato de Policías Locales (SAPOL).
El representante de CCOO y guardia urbano, Jordi Gallart, explica que hace casi una década que en el Ayuntamiento no se renueva el convenio laboral. El último se firmó en 2009. Durante los años de crisis, los funcionarios creyeron que no era el momento de plantear nuevas reivindicaciones, pero hace dos años denunciaron el convenio ante la justicia. "Fue un formalismo para empezar a hablar", dice Gallart.
AUMENTO DEL 0,58% TRAS 10 AÑOS
Hace un año empezaron las negociaciones entre la cúpula municipal y los representantes de los trabajadores, pero de momento no se han acercado las posiciones. Más bien todo lo contrario. "Nos ofrecen una subida del 0,58% tras una década. Hemos perdido un 15,9% de poder adquisitivo. Y encima nos dicen que somos unos privilegiados", afirma Gallart. Quien lo hace es, supuestamente, un gobierno de izquierdas. Este jueves, Metrópoli Abierta ha avanzado que las protestas incluirán escraches a la alcaldesa.
Al margen del aumento salarial, la disputa incluye otros frentes, como poder disponer de seis días de permiso que otros ayuntamientos ya tienen. En el caso de los bomberos, además, se pide equiparar la jornada a la del resto de funcionarios y un aumento de plantilla, algo que también reivindica la Guàrdia Urbana desde hace tiempo.
Según Gallart, la concentración de este viernes es el inicio de una serie de protestas que, en caso de no llegar a un acuerdo, tendrán continuidad. A buen seguro que, a un año de las elecciones, Colau tomará nota para cerrar un nuevo convenio lo antes posible.