Mayor presencia policial, mejor colaboración entre cuerpos policiales... La Junta Local de Seguridad celebrada en el Ayuntamiento de Barcelona ha decidido poner en marcha una serie de medidas para intentar frenar el aumento de los delitos en la ciudad, sobre todo en el distrito de Ciutat Vella. La alcaldesa Ada Colau, el comisionado de seguridad del Ayuntamiento, Amadeu Recasens, el secretario general del departamento de Interior, Brauli Duart, la juez decana de Barcelona, Mercè Caso, y representantes de los cuerpos policiales, Guàrdia Urbana, Mossos d'Esquadra, Policía Nacional y Guardia Civil, han analizado la crítica situación que se vive en el distrito central de la ciudad.
El principal acuerdo, según Ada Colau, ha sido la decisión de aumentar la presencia de policial uniformada en la calle y la creación de una comisión de seguimiento para conocer de primera mano el día a día de la situación, para saber si las medidas adoptadas dan los resultados previstos.
Una de las medidas más importantes ha sido la de la reorganización de los efectivos de los Mossos en la ciudad de Barcelona. De esta manera, su presencia aumentará en las calles de Ciutat Vella, para que los ciudadanos puedan percibir una mejor sensación de seguridad, siempre que sea necesario.
1 DE NOVIEMBRE
Ada Colau ha asegurado tras la reunión la constatación del aumento de los hechos delictivos, pero ha intentado diluir su responsabilidad. “Hace tiempo que aumentan los delitos, pero no solo en Barcelona, en toda Catalunya. Pero también ha aumentado la actividad policial, aunque nosotros ya dijimos hace tiempo que hacen falta más mossos”.
También ha responsabilizado al poder judicial ya que, según ella, no da abasto a juzgar todos los delitos. “Pero solo con policía no se resuelve. Hace falta que se cree otro juzgado de guardia, ya que el que hay ahora está saturado y cada vez se retrasan más los juicios, lo que da a los delincuentes cierta sensación de impunidad”.
Otra de las novedades es la creación de una comisión de seguimiento “para conocer el impacto y la efectividad de las nuevas medidas puestas en marcha. En ella estarán los directores de los cuerpos policiales comprobando la aplicación del acuerdo. Esto es una demanda vecinal y los vecinos tiene razón, debe haber presencia policial más visible y la sensación de que no hay ninguna zona oscura en Ciutat Vella”.
La fecha elegida para que estos cambios se pongan en marcha es el 1 de noviembre y la alcaldesa ha afirmado que “seré la primera en levantar la voz si en poco días no empieza a notarse”.
REORGANIZACIÓN
Aunque, por el momento, una de las principales y reiteradas peticiones de la alcaldesa de la ciudad, el aumento de la plantilla de los Mossos, no es posible, ya que, tal y como ha indicado el secretario general del departamento de Interior, Brauli Duart, se deben de cumplir unos plazos para la convocatoria de plazas y la formación de los nuevos agentes, por lo que la solución adoptada ha sido la de la reorganización del cuerpo en Barcelona.
Por otro lado, la presencia de la juez decana de Barcelona en la reunión ha servido para poner de manifiesto la necesidad de la creación de un nuevo juzgado de guardia que evite los enormes retrasos que ahora existen a la hora de juzgar los numerosos delitos que se producen en la ciudad, lo que lleva a que muchas veces los delincuentes pueda sentirse impune.
Duart también se ha referido a la creación de un “equipo de trabajo para revisar los convenios de colaboración vigentes, que se firmaron en 2005. Se actualizarán y se estudiará la fórmula para que el modelo de seguridad que se ponga en práctica en Barcelona puede luego extenderse a toda Catalunya”.