Los barceloneses que sopesan dejar Catalunya se disparan
El 27% de los residentes en la ciudad piensa en un cambio de residencia, en buena parte al resto de España
10 noviembre, 2018 23:21Noticias relacionadas
El aumento de los alquileres y la inestabilidad política de Catalunya son los dos factores que impulsan a muchos barceloneses a plantearse un cambio de residencia. Según el segundo Barómetro de Centre d'Estudis Sociològics para Metrópoli Abierta, el 27% de los residentes en la Ciudad Condal contempla un traslado. Entre quienes expresan su voluntad de abandonar la ciudad, el 26% afirma que quiere irse al resto de España (a cualquier Comunidad Autónoma menos Catalunya) y el 8,8% sopesa la opción de irse al extranjero.
Los barceloneses que quieren cambiar de domicilio esgrimen diversos motivos. El 27,5% argumenta el precio de la vivienda para plantearse un traslado. La segunda opción más citada (13,6%) es el deseo de mejorar la vivienda y un 9,1% reconoce su insatisfacción con la calidad de vida de su barrio. La inseguridad es citada por el 7,8% de los ciudadanos y el 5,8% reconoce, abiertamente, su hartazgo con la actual situación política.
JÓVENES, DEL EIXAMPLE Y DEL PSC
Las personas de 25 a 34 años son las más proclives a un posible cambio de residencia (44,6%). Por distritos, sorprende que uno de cada tres ciudadanos del Eixample (33,3%) contemple un cambio a corto o medio plazo. Los votantes del PSC (39,8%) en 2015, curiosamente, son los más críticos con su situación actual.
El 38,1% de los barceloneses que se plantea un cambio de residencia quiere hacerlo a los alrededores de la capital catalana o a una población de la provincia de Barcelona, mientras que el 8,7% ve más factible un traslado al resto de Catalunya. El 26% medita un cambio para irse a otras provincias españolas y el 8,8% contempla la posibilidad de irse de España.
PREOCUPACIÓN EN CIUTAT VELLA
Entre quienes esgrimen el precio de la vivienda como el principal factor para estudiar un cambio de residencia, el 52,9% vive en régimen de alquiler. Significativo también es el dato que refleja que el 26,3% que medita un traslado por motivos de inseguridad o delincuencia vive en Ciutat Vella. La inestabilidad política, por su parte, afecta a las personas de edad comprendida entre los 65 y los 74 años (15,2%).
Barcelona vive tiempos inciertos. Tiempos conflictivos e inseguros. Actualmente, el 65% de los barceloneses están descontentos con la gestión de Ada Colau. En el primer Barómetro, realizado en junio, el malestar era del 57%. Es decir, ocho puntos menos.
Las mayores críticas a Colau se centran en su incapacidad para combatir los hechos delictivos. El 48,5% de los barceloneses recalca que la falta de seguridad es el aspecto que más ha empeorado la ciudad desde el pasado junio.
LOS GRANDES CONFLICTOS DE BARCELONA
La primera representante de Barcelona también suspende en la gestión del top manta, de los narcopisos, de la crisis de los taxis, las entradas y salidas de Barcelona y la proliferación de patinetes.
El turismo sigue siendo uno de los problemas más citados por los barceloneses, pero ya no suscita tanto rechazo como antes del verano. Solo el 19,8% de los barceloneses lo percibe como un aspecto negativo. Los ciudadanos se muestran mucho más preocupados por el aumento de la inseguridad y la falta de una política de vivienda efectiva.
Según el estudio demoscópico, uno de cada tres barceloneses afirma que han sufrido algún tipo de delito en los últimos tres años. El porcentaje se acerca hasta el 50% entre los ciudadanos de 18 a 34 años.
LOS SERVICIOS MUNICIPALES
La seguridad se ha convertido en un problema global. La gestión de los narcopisos, por ejemplo, incluso es suspendida por los votantes de Colau en 2015.
Los servicios municipales, en cambio, reciben una buena nota de los barceloneses. Los mercados (7,5), el metro (7,1) y el agua (7,1) son los mejor valorados. Los que obtienen peor nota, un simple aprobado, son la Guàrdia Urbana (5,9) y la limpieza (5,7).
Los resultados obtenidos en esta encuesta del Centre d'Estudis Sociològis sobre el grado de satisfacción y descontento de los barceloneses se han obtenido tras realizar 600 entrevistas a hombres y mujeres de 18 o más años empadronados en Barcelona, con derecho a voto en las elecciones municipales de 2019. El nivel de confianza para los resultados es del 95,5%. El trabajo de campo mediante entrevistas se realizó entre el 8 y el 17 de octubre de 2018.